Por Valentín Varillas
La ordeña de ductos de Pemex no cayó en el estado con la llegada de los gobiernos de la 4T.
Se mantuvo prácticamente igual que en los oscuros tiempos del morenovallismo.
Protección oficial a las bandas dedicadas a ese ilícito, además de la aplicación de todo tipo de presiones para que empresarios del ramo gasolinero vendieran el combustible robado.
Sin embargo, desde el gobierno federal, el de López Obrador y teniendo a Adán Augusto López como secretario de Gobernación, se llevó a cabo una estrategia de manipulación de datos y maquillaje de cifras, que le permitieron al expresidente López Obrador hacer públicos números falsos sobre la realidad de este delito, en cientos de conferencias matutinas llevadas a cabo desde Palacio Nacional.
Puebla fue una de las entidades del país en donde Petróleos Mexicanos en donde reportó por seis años “cero pérdidas” económicas por huachicol, pero que al mismo tiempo registró un aumento exponencial en el número de tomas clandestinas descubiertas en su territorio.
Existió un subregistro intencional que generó un tramposo manoseo del discurso público.
Y es que, a través de diversas solicitudes de información hechas por medios nacionales, la paraestatal reconoce el aumento en perforaciones a sus ductos en 10 estados de la República, entre ellos el nuestro, sin que esta realidad se traslade a alguna afectación en sus finanzas.
Imposible.
Hay, por lo menos, según sus propios datos, un daño patrimonial del orden de los más de 5 mil 400 millones de pesos al cierre del 2024.
Hidalgo, Veracruz, Estado de México, Jalisco y Puebla, concentran más del 75% del total de tomas clandestinas que se ubican en territorio nacional.
Estos sí, son los datos reales, los que reflejan con toda fidelidad la realidad que vivimos en materia de este delito y no los que aseguraba tener, invariablemente, quien llevó las riendas del país en la administración anterior.
Ahora que la presidenta Sheinbaum le ha declarado la guerra frontal al ingreso ilegal de combustible a México, que el tema se ha masificado y viralizado en medios de comunicación y redes sociales, es urgente recordar estas cifras y no olvidar que el viejo huachicol, el tradicional, goza de cabal salud y sigue siendo fuente inagotable de millonarios ingresos para todos los involucrados.