Por Alejandro Mondragón
La agenda de la gira de arranque de campaña de la candidata morenista a la presidencia, Claudia Sheinbaum, tiene una lectura no triunfalista.
Más allá que hoy el control de las encuestas, donde la ubican con amplias ventajas, recayó en manos de Julio Scherer y su primo Hugo, Doña Claudia no se confía.
Le explico:
La primera semana de campaña arrancó en Hidalgo para seguir por Guanajuato, San Luis Potosí, Querétaro, Estado de México, Michoacán y cerrar en Puebla.
No se equivoquen en que visita tales entidades por afectos o por tratarse de bastiones del PAN o PRI.
La última encuesta del periódico El Financiero si no encendió los focos rojos, sí los amarillos en los cuartos de guerra de la Cuarta Transformación.
A diferencia de otros sondeos que ponen en general la disputa a la presidencia entre dos: Sheinbaum contra Xóchitl Gálvez, la encuesta de El Financiero evaluó por regiones del país.
Y aquí exhibió fortalezas y debilidades de las candidatas.
La región norte y sur puede catalogarse como zonas de confort para Claudia y de pesadilla para Xóchitl.
En el Norte Sheinbaum aventaja Gálvez 18 puntos, y en el Sur, la diferencia a favor de la morenista es de 29 por ciento.
El problema se localiza en dos regiones: el centro occidente y centro.
En la primera la ventaja de Sheinbaum sobre la panista es de apenas 4 puntos; y en el centro del país se sitúa en 13 por ciento.
Eso en el arranque de campaña, con tres meses por delante.
Y es precisamente que los estados que primero visita la candidata morenista son: Hidalgo, Guanajuato, San Luis Potosí, Querétaro, Estado de México, Michoacán y Puebla.
Una cosa es lo dicen las encuestas claudistas, pero otra la agenda de la candidata Sheinbaum.