Por Alejandro Mondragón
¿Por qué legisladores y diputadas poblanas aprobaron las cuentas públicas del barbosismo (2019, 2020 y 2021) con un socavón financiero por 25 mil 275 millones de pesos?
En todas sus comparecencias, la secretaria de Planeación y Finanzas, María Teresa Castro Corro acudió a defender las cuentas públicas y responder las preguntas en el Congreso del Estado.
Y entonces, ¿qué pasó?
De acuerdo con la información obtenida por Al Portador y revisar la letra chiquita de las cuentas públicas, lo que en verdad ocurrió es que Castro Corro maquilló la información.
La funcionaria siempre remitía a lo que venía en las cuentas, que en realidad no estaban los datos del socavón financiero. Incluso, el quebranto de más de 600 millones ocurrido en 2021 con Accendo Banco no lo incluyó en la Cuenta Pública de ese año, publicada en mayo del 2022.
Es decir, ocultó, mintió o maquilló los datos en la búsqueda de tapar el hoyo, que al final resultó ser tan grande, como un socavón.
Resulta inverosímil que la funcionaria, que había trabajado en la oficina de Contabilidad de Hacienda con su jefe directo, Jorge Nuño, hoy secretario de Infraestructura en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, haya invertido dinero de los poblanos en diversas entidades financieras con las tasas de interés más bajas.
Si Castro Corro maquilló las cifras al Congreso, entonces mintió o actúo en complicidad con la Auditoría Superior del Estado.
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