Por Karina Fernández
Después de que Alejandro Armenta desistió de las impugnaciones promovidas en contra de la postulación de Luis Miguel Barbosa Huerta como candidato de Morena al gobierno de Puebla, ambos personajes ofrecieron una rueda de prensa conjunta donde finalmente, después de 26 días de campaña, el senador con licencia levantó el brazo del aspirante a Casa Puebla reconociendo su triunfo en la contienda interna.
Miguel Barbosa explicó que durante el encuentro con el senador se resolvieron las diferencias de fondo y se establecieron los acuerdos que se centraron en dos aspectos: unidad para ganar la gubernatura de Puebla y diálogo permanente sobre la campaña y los asuntos que competen al estado.
“Nosotros coincidimos en que un litigio y la preservación del mismo tenía que resolver la parte legal pero no resolvía la parte política del conflicto, quedaba vigente y por tanto nos reunimos y tomamos los acuerdos respectivos, un acuerdo unitario de participación en la campaña y diálogo permanente”, dijo.
Barbosa Huerta reiteró que no estuvieron a discusión cargos públicos para el senador en su próximo gabinete; aunque dejó abierta la puerta para discutir dicha posibilidad después de los resultados del 2 de junio.
Detalló que en el encuentro del pasado lunes, el senador Ricardo Monreal fungió como el árbitro del encuentro, cuyo papel fue fundamental para que ambos morenistas sellaran los acuerdos de los que dijo, la dirigencia nacional está al tanto y conforme con los mismos.
Indicó que su reconciliación va en serio, por lo cual ya se reunieron con diputados locales de la coalición “Juntos Haremos Historia” pertenecientes a las fracciones de Morena, Partido del Trabajo y Encuentro Social para que también se incorporen a su campaña.