Por Rodolfo Rivera Pacheco
La renuncia de Margarita Zavala de Calderón a su militancia panista de más de 30 años, aun cuando no se concrete todavía su registro como aspirante a candidata presidencial independiente (el plazo para registrarse se amplió una semana más y… en una semana pueden pasar muchas cosas), cimbró de raíz el proceso electoral 2018.
Desde luego era una probabilidad cantada por la misma ex Primera Dama desde hace algunos meses (ahora resulta que ya todos lo habían predicho… por favor), pero también sabíamos que eran amagues para presionar al dirigente nacional del PAN y su grupo, a entregarle a ella la candidatura presidencial blanquiazul. No perdamos de vista que detrás de Zavala Gómez del Campo siempre está el ex Presidente Felipe Calderón, quien nunca ha podido aceptar que ya no tiene el poder ni influencia de cuando fue primer mandatario.
Pero lo que tampoco podemos negar es que Margarita Zavala era la aspirante panista mejor posicionada en todas y cada una de las mediciones demoscópicas nacionales realizadas por empresas serias. Siempre ha sido la más conocida y la que despertaba mejor intención de voto de los tres aspirantes más visibles del PAN, ella, Ricardo Anaya y Rafael Moreno Valle. Jamás la alcanzaron, aún cuando el aparato propagandístico morenovallista ha filtrado algunas tonterías de que él era ya el que tenía mejores números. Falso y todos lo sabemos.
Pero independientemente de lo que pueda pasar con Margarita Zavala independiente (insisto, si sí se registra de aquí al sábado próximo), por supuesto cambian muchas cosas (se fragmenta el voto anti PRI, el PAN se desfonda como opción, el Frente PAN-PRD-MC cruje ante las críticas a sus tres líderes, AMLO celebra la falta de unidad de éstos, y mil etcéteras), para el proceso electoral en Puebla también van a ocurrir consecuencias evidentes.
Y es que como hemos dicho aquí mismo numerosas ocasiones desde hace años, lo que ocurra con Rafael Moreno Valle y el PAN a nivel nacional, incidirá necesariamente en su grupo en Puebla.
Yo creo que hay tres escenarios posibles para Moreno Valle y que repercutirán en las elecciones para Puebla. Y cada uno tiene más o menos probabilidades de ocurrencia.
ESCENARIO A: Ricardo Anaya es candidato Presidencial del Frente PAN-PRD-MC y quien se sume.
Quiere decir que Anaya pudo controlar la situación y se impone a toda costa como candidato presidencial. Desde luego sumamente disminuido en posibilidades de triunfo y cuestionado por la militancia panista, quien se dividirá y muchos votarán por Margarita Zavala. El Frente perdería la elección presidencial ante MORENA o un PRI fortalecido con un candidato bien visto hasta por los panistas, que sería José Antonio Meade.
En este escenario, Rafael Moreno Valle habría negociado con el queretano que lo apoyaría para la Presidencia siempre y cuando le dejen imponer como candidata del Frente a su esposa en Puebla. Para el ex Gobernador habría seguramente una Senaduría y promesas de dejarle el partido después de la elección.
Quién sabe si Ricardo Anaya creería la promesa morenovallista de apoyarlo… cuando muchos pensamos que Moreno Valle operaría pero a favor del candidato del PRI –Meade- para darle una lección a Anaya, exhibirlo como el gran perdedor y él quedarse ahora sí con el control del PAN con miras a su proyecto para el 2024.
En Puebla la candidata del Frente sería Martha Erika Alonso con todo el apoyo de su esposo (dinero, dinero y más dinero). En el PRI lanzarían a un candidato sacrificable ante la negociación al más alto nivel (Meade-RMV). Pongan el nombre que quieran al sacrificable priísta. MORENA, si insiste en lanzar a un desconocido también perdería irremediablemente.
Martha Erika Alonso ganaría la elección y se instauraría un Maximato familiar con la consorte del ex Gobernador.
Terrible escenario para Puebla y su endeble democracia.
Probabilidad de ocurrencia: 60 o 70 %
ESCENARIO B: Rafael Moreno Valle es candidato Presidencial del Frente.
En este escenario Ricardo Anaya es presionado por todos lados y acepta una elección abierta de la candidatura presidencial del Frente. Rafael Moreno Valle convence ($) a los otros líderes (Barrales-Chuchos-Dante) que él debe ser el candidato presidencial y además suma a Nueva Alianza al proyecto. Hay una publicitada elección abierta del candidato y él gana limpiamente (¿?).
Desde luego su candidatura es débil y nunca puede remontar el tercer lugar en las encuestas, ante un AMLO que sigue teniendo empuje pero ahora también con un José Antonio Meade y PRI fortalecidos, además de una Margarita Zavala quitándole demasiados votos al PAN, desprestigiado y dividido.
En este escenario creo que RMV negociaría a tiempo su sacrificio para que Meade ganara al Peje, con la promesa de ser integrante de un “Gobierno de Coalición” y él ocupara alguna cartera importante en el Gabinete (Zavala también tendría la misma promesa). Quién sabe si RMV aceptara perder, pues se verían muy dañadas sus aspiraciones presidenciales futuras. Pero en este escenario es lo mejor que podría obtener.
No es tan mal escenario para Puebla, pues RMV no podría llevar a su esposa como candidata a Gobernador. Creo que entonces negociaría con Meade-PRI para que éste lance a un candidato que gane (pongan el nombre que quieran) pero que sea aliado y el sacrificable en este caso podría ser el abanderado del PAN-Frente (¿Banck? ¿Javier Lozano?).
Escenario complicado y con pocas probabilidades de ocurrencia: 20 o 30%
ESCENARIO C: La ruptura. Anaya candidato Presidencial, Moreno Valle se sale del Frente.
Es difícil que ocurra pero siempre está ahí como probable. Ricardo Anaya no abre la elección del candidato presidencial del Frente y se impone él como siempre ha sido su plan. Rafael Moreno Valle se indigna y también se sale del PAN pero no para ser candidato independiente sino para ser el abanderado del PRD-MC y Nueva Alianza (quizás hasta otro partido).
Obviamente no tendría posibilidad de ganar la elección presidencial, pero se repetirían las negociaciones del escenario B: Pacto con Meade para que no gane AMLO. Recompensa de formar parte del Gobierno de coalición por el servicio.
En Puebla su esposa no sería candidata, pero sí impulsaría fuerte a sus candidatos a Diputados, Senadores y Alcaldes. Quién sabe si pactaría con Meade-PRI el que gane un candidato tricolor cómodo para la Gubernatura o bien que sea uno de su grupo en una alianza soterrada. Espacios para todos.
Es poco probable que este escenario ocurra (rompimiento de RMV con el PAN) pero reitero, ya cualquier cosa puede ocurrir en la política mexicana.
Probabilidad de ocurrencia: 10%
VARIABLES INDEPENDIENTES: Hay variables independientes en cualquier proceso. Aquí algunas que pueden incidir necesariamente en el resultado final de cualquier escenario:
- Quién será el candidato de MORENA en Puebla.
- Que Meade NO sea el candidato Presidencial del PRI.
- Que en Puebla se rompan todas las negociaciones.
- Participación/abstencionismo en elección 2018.
- Más desastres naturales imprevistos.
- Un largo etcétera.
