Por: Valentín Varillas
En un país con casi 60 millones de pobres y en un estado que ocupa el cuarto sitio con mayor índice de pobreza a nivel nacional, la lógica más elemental indicaría que el presentar alternativas de solución a este fenómeno social tendría que ocupar uno de los lugares centrales de la oferta electoral de quienes pretenden gobernar Puebla.
Nada más alejado de la realidad.
Tal parece que los cerebros alrededor de la estrategia electoral de los candidatos han recomendado profundizar lo menos posible en el asunto, ya que los datos duros en la materia afectan contundentemente a panistas y priistas.
Profundizar en el tema de la pobreza en una campaña que pretende ser exitosa resulta en los hechos un suicidio electoral.
En el estado, por ejemplo, más del 65 por ciento de sus habitantes viven en situación de pobreza.
En los últimos dos años han crecido los pobres poblanos en el orden de 80 mil, dando un total de cuatro millones en todo el estado.
Ninguna de estas cifras puede ser considerada como materia prima para un spot del candidato del PAN.
En la primera mitad del sexenio morenovallista, la política social se ha manejado principalmente con criterios netamente electorales, lo cual explica estas cifras.
A nivel nacional, los gobiernos priistas entregan cuentas igual de malas o hasta peores.
En los primeros dos años del sexenio de Enrique Peña Nieto se reportan dos millones de nuevos pobres.
La cifra nacional alarma: en México existen 55.3 millones de personas en situación de pobreza.
Es decir, la política económica implementada por el gobierno de la República no ha podido evitar siquiera que este fenómeno crezca.
Los resultados obtenidos son inclusive menores a los de otros países de Latinoamérica.
De acuerdo con el más reciente reporte de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), México es el quinto país más pobre de la región y presenta rezagos importantes en el reto de reducir la pobreza.
Tenemos un porcentaje más alto de pobres que Bolivia, Ecuador, Colombia, Perú y República Dominicana, que históricamente habían estado a la saga de México en ese indicador.
El documento de Cepal también muestra que la tasa de pobreza cayó en la mayoría de países entre 2010 y 2014.
Las mayores variaciones se registraron en Uruguay (-14.9%), Perú (-9.8%), Chile (-9.1%) y Brasil (-7.9 por ciento).
En Honduras, México y Venezuela, en cambio, la pobreza se ha ido incrementando a un ritmo anual de entre un 2% y un 5%, precisó el organismo
Nada que presumir.
Lo anterior explica el por qué el tema que en teoría tendría que ser el más importante, ha estado prácticamente ausente en la lucha de partidos.
Las prioridades están al revés.
Hoy se privilegia lo anecdótico, la promesa fácil y la descalificación a bote pronto, antes de presentar propuestas serias para combatir la principal plaga del estado y del país.
Y luego se preguntan por qué hay quienes prefieren de plano no votar.
