Por Shanik David
El Partido de la Revolución Democrática prevé un resultado electoral poco favorable, incluso inferior al que se obtuvo en la elección de 2015, cuando alcanzaron el 9 por ciento de los votos que se emitieron en todo el estado.
Esta debacle se debe al espectáculo y circo mediático en el cual se ha visto involucrado el partido en las últimas semanas, con el debate por las alianzas en el Comité Ejecutivo Nacional, e incluso por el posicionamiento que dio el diputado Ignacio Mier Bañuelos durante el quinto informe de labores de Rafael Moreno valle al asegurar que en Puebla no hay presos políticos.
Así lo señaló la presidenta del Comité Ejecutivo Estatal del partido Socorro Quezada Tiempo, al asegurar que todos, incluida ella, le han hecho un grave daño al partido que los llevará a alcanzar un porcentaje “bajísimo” en el proceso electoral del próximo 5 de junio.
Refirió que más allá del tema de si habrá o no alianza -decisión que Agustín Basave puso en manos del dirigente nacional del PAN Ricardo Anaya-, lo que importa es que el partido analice la situación de los votos que recibirá en la elección, pues si bien no se corre el riesgo de la perdida del registro, sí representa una alerta para el organismo político.
De manera enfática, la también diputada local acusó que incluso hasta el momento ninguno de los personajes que abogan a que el partido se alíe a Acción Nacional han apuntado cuál será el beneficio para el PRD en términos de votos, pues, dijo, ni ellos mismos lo saben.
“Tenemos 84 mil militantes que están en contra de la alianza, pero eso no es lo que importa”, reiteró Quezada Tiempo, al lamentar la situación en la que se encuentra el partido.
Uno de los ejemplos del espectáculo mediático en el que se ha visto involucrado el partido es el desplegado que se publicó el pasado martes, en el cual, supuestamente, 129 integrantes del consejo estatal pedían que se concretara la alianza.
Sin embargo, Quezada Tiempo apunto que, en primer lugar, para que esta decisión tenga peso se necesitan dos terceras partes del consejo, lo que representa 139 respaldos, por lo que el posicionamiento no alcanza los votos para que se aprueba.
En segundo lugar, señaló que las firmas presentadas con el documento son apócrifas, pues habló directamente con algunos de los militantes que aparecen en el desplegado y ellos le informaron que en ningún momento habían dado su respaldo a tal posicionamiento.
Por esta razón, acusó que se trató de una acción tomada por los operadores políticos del partido, pero no de los que buscan el beneficio del perredismo sino los que defienden los intereses del PAN y del morenovallismo al interior del instituto político.
