Por Shanik David
El anuncio que hizo Agustín Basave Benítez, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en relación a que tiene previsto reunirse con los dirigentes nacionales del PAN y de Nueva Alianza para analizar el tema de una posible coalición para la elección de 2016 no fue recibida nada bien por la líder estatal del partido, Socorro Quezada Tiempo.
Visiblemente molesta, la también diputada local refirió que esta decisión es un primer paso para volver a entregar el partido a Acción Nacional, ignorando los argumentos que presentó en contra de esta determinación la dirigencia estatal.
Lamentó que aunque se sostuvieron reuniones con representantes de la dirigencia estatal para plantear la situación que se vive en Puebla y por qué en el estado no es viable una nueva unión con el albiazul, al final nada de esto pareciera importar.
En estas reuniones, comentó, se le presentó al CEN un panorama de la situación que se vive en Puebla bajo el morenovallismo, con la persecución de los opositores a las políticas públicas y la represión generalizada, lo cual con este tipo de alianzas sólo se continuarán.
Es más, resaltó que se apoyarse a José Antonio Gali Fayad esto representaría un espaldarazo a la continuidad al modelo actual de gobierno, por lo que lanzó un llamado para que la dirigencia reflexione sobre lo que se quiere para Puebbla.
Como un ejemplo de la desintegración del partido es el caso de Adán y Paul Xicale, quienes, dijo, fueron militantes del PRD hasta que éste se unió al PAN y perdió su identidad, por lo que ambos activistas decidieron pasarse a las filas de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Incluso, a pesar de que los dos cholultecas fueron detenidos por una causa social, el partido no hizo nada para apoyarlos a lo largo de sus casi 14 meses de encarcelamiento, lamentó la dirigente, quien dijo que ella en su momento también fue integrante de movimientos sociales pero que ahora “es parte de la burocracia”.