Por Alejandro Mondragón
En Los Pinos y en el CEN del PRI tienen muy claro que no habrá pacto, ni acuerdo alguno, sobre la elección del 2016 en Puebla.
En términos pugilísticos será toma y daca.
En el ámbito callejero: a putazo limpio.
Saben también que existen dos cartas competitivas para pelear Casa Puebla al gobernador Rafael Moreno Valle.
La senadora Blanca Alcalá Ruiz y el ex diputado federal, Enrique Doger.
De Alcalá señalan que no cumple acuerdos.
De Enrique Doger consideran que traiciona acuerdos.
Sin embargo, admiten que sólo cuentan con el ex gobernador Mario Marín para la operación electoral, no así Melquiades Morales (su familia trabaja en el gabinete de Moreno Valle), Manuel Bartlett (es senador por MORENA, antipeñista y antibeltronista) y Mariano Piña Olaya (su hijo es diputado panista y su esposa está en el INAI gracias al góber poblano).
Eso explica que Marín se sienta cotizado y organice a la chiquillada para crear un bloque antiAlcalá y contra Doger, pero a la vez envíe a este último a sus operadores: Valentín Meneses y Roberto Marín.
Lo cierto es que Peña Nieto ya dejó en claro que él sólo acuerda con pares, mientras que Beltrones tiene la instrucción de operar la unidad, porque las últimas encuestas de Los Pinos ponen a Moreno Valle y su candidato Antonio Gali en la ruta de la derrota electoral del 2016.
Se interpreta la llegada de Martha Érika Alonso, esposa de Moreno Valle, como una respuesta a radicalizar el discurso, luego de que el mandatario se percató el cierre de llaves que antes tenía abiertas para negociar en Los Pinos.
Los tiempos cambiaron.
La candidatura del PRI no se resolverá en Puebla y menos en El Royalty o El Desafuero, sino en Los Pinos y la acción será operada por Beltrones.
Hasta noviembre empezará el proceso.
Doger puede presumir a Beltrones, pero que no se olvide que la hoy representante de los intereses de Peña Nieto en Puebla se llama Rosario Robles, jefa de Lastiri, pero ex empleada de Blanca Alcalá en el ayuntamiento de Puebla entre 2007 y 2010, cuando con el grupo Sostén asesoraba a la alcaldesa.
Moreno Valle toma la ruta del PAN con el control del partido en Puebla, a través de su esposa, pues parece que el camino por la vía de la alianza con Los Pinos se cerró.
La decisión de mandar al PAN a la señora se ha considerado en círculos del poder como un error.
Los operadores de Peña Nieto tienen la instrucción de respetar la relación institucional, pero en lo electoral el trato será de toma y daca.
En la próxima entrega: ¿Y qué se mueve en el PAN?, la verdad detrás de esas nerviosas sonrisas.