Estudiantes de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla realizaron una manifestación la tarde de ayer para exigir a las autoridades universitarias el cese a la represión que se vive en la casa de estudios.
De manera puntual, señalaron a la Secretaría General de la BUAP como la responsable de orquestar las agresiones y persecución en contra de los jóvenes que tienen algún activismo dentro de la vida universitaria, en particular a Benjamin Dimas y Rufino Máquez.
Fidel Sánchez, miembro del movimiento universitario, explicó que es la Secretaría General, a cargo de René Valdiviezo, la que tiene la facultad de tomar las decisiones y controlar a los cuerpos de vigilancia de la universidad, en coordinación con la Dirección de Apoyo en Seguridad Universitaria (DASU).
Es por esto que es esta área la que debió haber participado en la decisión de permitir el ingreso de grupos de corte militar o porros quienes, vestidos de civil, siguen, graban y hasta intervienen las comunicaciones de los estudiantes activistas.
Acusó que Valdiviezo y su equipo de trabajo tienen la responsabilidad de mantener las relaciones de las autoridades con los universitarios, las cuales hasta el momento siguen siendo tensas.
Por esta razón, como parte de la marcha, se lanzó un llamado a que el rector Alfonso Esparza Ortiz tome acciones al respecto, ya se por medio de ejercer un mayor control sobre sus colaboradores o incluso darlos de baja para evitar mayores afectaciones a los estudiantes.
Señaló que ahora que el rector ya dio un posicionamiento donde dijo que trabajaría a favor de los alumnos, ahora tiene que demostrar con acciones que esto no se trató de solo un discurso sin fondo
Como parte de la marcha además se pidió que cese el hostigamiento hacia los siete estudiantes que fueron arrestados el pasado viernes, pues los jóvenes tienen miedo incluso de ir a clases.
Sánchez narró que los estudiantes temen ir solos a algún lado incluso dentro del propio campus, ante el riesgo de que de un momento a otro les vuelvan a abrir los procesos en su contra y los detengan.
Esto, añadió, es parte de la política de terror aplicada desde el gobierno estatal, pues ahora no sólo se busca atemorizar a la gente que participa en marchas, sino a jóvenes que se encuentran en la escuela.
La marcha de los jóvenes universitarios de juntó con una movilización realizada por organizaciones sociales, encabezada por el Comité Democrático Magisterial Poblano, por medio de la cual exigieron justicia para Miguel Guerra Castillo, vocero de la disidencia magisterial detenido la mañana del pasado lunes.
Trascendió que por la noche de ayer, luego de pagar la fianza que se la había impuesto, Guerra salió de la cárcel de San Miguel para continuar su proceso en libertad.