A cuatro días del choque que se dio en el Mercado Hidalgo entre comerciantes de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, y afiliados a la Doroteo Arango, quienes incluso llegaron supuestamente con armas de fuego, ambas agrupaciones exigieron a las autoridades intervenir para acabar con las hostilidades.
Por la mañana, Antonio Ordaz Alatriste, líder de la Doroteo Arango, dio una rueda de prensa en la que aseguró que su grupo no fue el responsable del choque, pues dijo que ellos se encontraban laborando en las bodegas conocidas como Eucaliptos, y que ahí fueron agredidos por los miembros de la 28 de Octubre.
Esto a pesar de los señalamientos e incluso pruebas fotográficas de que los de su agrupación ingresaron al mercado y detonaron armas de fuego al aire, lesionando a algunos locatarios y clientes en el proceso, por lo que fueron repelidos por los comerciantes.
Ante estos señalamientos Ordaz Alatriste se mostró molesto, y reclamó que son cuestiones infundadas, y que la única arma que había en el lugar era una pieza antigua que él tenía en su oficina; pese a esto horas más tardes se mostró una fotografía del arma que su hijo portaba al momento de la agresión.
El líder de la Doroteo Arango incluso acusó que la UPVA 28 de Octubre tiene el respaldo del ayuntamiento de Puebla, esto pese a los operativos constantes en contra de la organización liderada por Rita Amador, en los cuales es el grupo de Ordaz el que ha salido favorecido con mayores espacios para sus ventas.
Sin dar una respuesta concreta al respecto, y evadiendo los señalamientos, el líder de los comerciantes simplemente señaló que el problema se originó por el programa de reordenamiento comercial impulsado por el ayuntamiento de Puebla, y que eso ocasionó la “avaricia” de la 28 de Octubre.
Sin embargo, horas más tarde, la UPVA realizó una marcha desde el Mercado Hidalgo que tenía como objetivo llegar al zócalo y pedir audiencia en el ayuntamiento, pero al llegar al cruce de la 3 Sur y la calle Reforma el contingente se topó con un fuerte operativo policíaco que les negó el paso.
Ante esto, redireccionaron su recorrido y llegaron hasta Casa Aguayo, donde alrededor de las 2 de la tarde entró un grupo a una mesa de diálogo con funcionarios estatales, de la cual salieron tres horas después con la respuesta de que al ser un problema del ayuntamiento la Secretaría General de Gobierno no puede intervenir.
Durante la marcha, Rita Amador destacó que en el último mes y medio ha presentado 16 solicitudes de audiencia con el titular de la Secretaría de Gobernación municipal, sin que hasta el momento haya una respuesta favorable.
Sobre las acusaciones hechas por Antonio Ordaz, simplemente comentó que ella sabe que no es una cuestión personal y que él “sólo esta cumpliendo ordenes”.
Esto, agregó, queda evidenciada en la impunidad en la que quedaron los agresores del pasado jueves, pese a las pruebas documentales de las armas y los ataques, por lo que incluso lanzó un llamado para que la Procuraduría General de Justicia investigue a fondo los hechos.
