El show del candidato tricolor fue transmitido íntegramente en el noticiero vespertino de Al Portador, evidenciando su sobreactuación cuando era entrevistado en vivo por el periodista José Daniel Hernández.
La evidencia fotográfica presentada por el candidato, sin embargo, no muestra ninguna agresión. Tampoco fueron presentados videos o dictamenes médicos de los supuestos “golpes en las costillas” que le dio uno de los comandantes en el destacamento.
No existen videos ni fotografías que documenten las agresiones físicas que el candidato del PRI a diputado por el Distrito VII denunció, y sólo se tiene el audio con los gritos que el ex director del Registro Nacional de Población lanzó en medio del entronque del camino que conecta a la autopista Puebla-Orizaba y la federal a Tehuacán.
Los gritos de “desesperación”
En el arranque de la entrevista, Armenta comenzó por señalar la presencia de más de 100 elementos de la Policía estatal que los detuvieron en un retén a él y a sus simpatizantes. Su primera gran “puntada” fue cuando afirmó que los policías tenían la orden de “sembrarles”: “sabemos que tienen instrucciones de sembrar armas y drogas a la gente trabajadora de Tepeaca para intimidarlos. Están utilizando el aparato represor del Estado”.
El show de Armenta continuó cuando decidió victimizarse y afirmar que los policías estatales pretendían repetir el caso Chalchihuapan en Tepeaca. “Seguramente están buscando un muerto (…) Estoy aquí con la Policía rodeado de elementos fuertemente armados junto con escopetas y con proyectiles de alto calibre como ellos le llaman cuando asesinan a los niños de Chalchihuapan, quieren repetir la historia de Chalchihuapan en Tepeaca, la Policía estatal quiere repetir los actos de Chalchihuapan”.
El clímax de la radionovela llegó cuando el candidato tricolor cambió el tono de su voz y sin detenerse comenzó a gritar: “quítenselo, quítenselo, quítenselo, quítenselo, quítenselo, quítenselo”, en alusión a que uno de sus simpatizantes había sido detenido por los policías.
Tras un breve momento en el que el conductor del noticiario cortó el audio, volvió a escuchase la voz de Armenta para lanzar los gritos con los que será inmortalizado: “¡nos están golpeando, auxilio, auxilio, auxilio!”.
A través de redes sociales, Facebook y Twitter, el priista difundió imágenes del retén en el que supuestamente fue agredido, pero en ninguna de ellas se observa la agresión y menos los supuestos golpes que le propinaron los elementos en las costillas.