02-05-2024 01:11:44 PM

Investigan a Mario Rincón por transas con el Fonden

alpor19

Datos inflados, padrón de afectados alterado, obras sin justificarse y, sobre todo, el expediente sobre los estragos de los huracanes Ingrid y Manuel en Puebla entre el 12 y 16 de septiembre del 2013 no corresponde a los 387 millones de pesos canalizados.

Nunca se confirmaron caminos incomunicados, albergues saturados y mucho menos la movilización de la estructura de gobierno en el estado.

Es más, el gobernador Rafael Moreno Valle estaba en Nueva York, en el preciso momento en que la Secretaría de Gobernación federal emitía la declaratoria de emergencia para 31 municipios afectados por las depresiones tropicales.

Antes de partir hacia la Gran Manzana en Estados Unidos, el mandatario giró instrucciones a su secretario de Desarrollo Social, Mario Rincón, para que entregar personalmente el expediente técnico sobre los daños.

La carpeta que se integró para exponerla al secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, tras su visita a Puebla el 16 de septiembre del 2013, fue todo un misterio.

Hoy se sabe que los datos y las cifras no correspondieron necesariamente con la realidad. Se inflaron.

Quien se encargó de operar los números y procesar los datos entregados al gobierno federal para la declaratoria de emergencia y liberación de los recursos del Fonden fue ni más ni menos que Omar Álvarez Arronte, ex líder del PRI municipal en Puebla, hoy operador de la campaña de Rincón por Tepeaca.

Las dudas predominan sobre las certezas, por qué se declaró una emergencia en un estado en el que su gobernador atendió otras prioridades en Nueva York.

Además, ningún albergue se requirió, las campañas de acopio de ayuda de poblanos fueron para Guerrero y los datos que manejan las delegaciones federales difieren del reporte entregado a Coldwell.

“Todo el apoyo recibirán las autoridades locales para agilizar la declaratoria del Fonden”, señaló el secretario de Energía ante el gobernador.

En esa reunión se habló de caminos bloqueados por derrumbes, pero oficialmente siempre se mencionó que ninguna carretera había quedado incomunicada.

Los mayores daños se han presentado en Tlaola con 114 viviendas, 25 cortes carreteros, daños graves en tres escuelas, una presa, la iglesia y la caída de tres puentes, pero tras su regreso de Nueva York el gobernador no visitó la zona. Sólo envió a supervisar a Cabalán Macari, secretario de Infraestructura.

Desde el 16 de septiembre, día en el que lo peor había pasado, Moreno Valle ya tenía la cifra de lo que se pediría: 387 millones de pesos.

La Federación subió de 25 a 31 municipios sin que se alterara la cantidad.

Muchos millones para reparar daños que al menos en los hechos no se vieron.

Ni la mitad de recursos del Fonden se requerirían, entonces la otra parte para dónde fue.

La experiencia de 1999 con los desastres en la sierra norte de algo sirvió.

El caso está en manos del Congreso federal.

alportador

About The Author

Related posts