Llegó el fin de año y para los trabajadores asalariados, el tan esperado aguinaldo. Esa prestación que otorga la empresa y que los empleados -por ley- deben recibir antes del 20 de diciembre, desata todo tipo de emociones incluso antes de recibirlo. ¿Pagar deudas? ¿Comprar regalos? Tentaciones y más tentaciones…
Y es que las promociones son el diablo, dirían las abuelas. Un diablo al que se enfrentan aproximadamente 33 millones de mexicanos que reciben una remuneración económica extraordinaria (aguinaldo o bono) al finalizar el año, de las 49 millones de personas, que según el INEGI (2013), están en posición económicamente activa (PEA). ¿Qué harán estos millones de mexicanos con ese dinero? Difícilmente la respuesta será ahorrar o invertir a futuro.
“Televisión HD a solo…, al 2×1, con el 50% de descuento…”, “Compra y te regresamos el 15% en monedero…”, “Compra ahora y paga en 20 meses con interés fijo”, son las sirenas que te abruman por todos lados con la intención de que compres. Y no está mal gastar pero qué pasaría si te dijéramos que ese dinero golondrino (que así como llega se va) puede ser tu mina de oro con un poquito de intención.
“Recibir el aguinaldo nos enfrenta a situaciones emocionales. Al escuchar todas estas promociones se afectan nuestras emociones, pero éstas son pasajeras y una vez que ese dinero sale de tu bolsillo, simplemente no regresa. Por ejemplo: ¿Cuánto gastaste en un pantalón que no usas hace un mes o en el saco guardado en tu vestidor con una puesta?
¡DETENTE! No tomes decisiones permanentes con emociones temporales. Antes de que empieces a repartir tu aguinaldo, te pedimos que te des un momento para pensar en esta propuesta: Ahorra a meses con intereses. ¿Cómo?
Alan Gómez, director de Ventas de Principal Afore explica que sería irreal pedirte que no gastes tu dinero en regalos o en pagar deudas, o en comprar cosas que tenías pendiente, pero qué tal destinar una parte de tu aguinaldo para un concepto que quizá nunca habías considerado: PAGARTE UNA PARTE DE TU AGUINALDO A TI MISMO.
Hacer este pequeño giro de pensamiento provocará que pienses en cuánto valió tu trabajo de un año y que gastes únicamente lo que vas a necesitar, explica el experto. El mejor regalo es el que hago de mí para mí”, agrega Gómez.
¿Y cómo hacer un ahorro a meses con intereses? El directivo de Principal te da cuatro opciones:
1.- Crea un fondo de inversión (Corto o mediano plazo)
Destina una cuarta parte a un fondo de inversión a corto o mediano plazo con un propósito específico, como el enganche para tu próximo auto, las vacaciones durante el verano, o cubrir algún imprevisto.
De acuerdo a la encuesta de Capacidades Financieras en México, del Banco Mundial, el 34% de la población puede cubrir un gasto importante en caso de un imprevisto; además, el 70% de los adultos reportan hacer planes financieros, pero solo un 34% los siguen.
2.- Aporta voluntariamente para tu retiro (Largo plazo)
¿Cuánto pagarías por recibir una pensión que te permita vivir con calidad en tu vejez? Haz cuentas: de acuerdo con cálculos gubernamentales, los trabajadores que no realizan aportaciones complementarias a su cuenta individual, recibirán una pensión de entre el 20 y el 35% de su salario actual, lo que quiere decir que si tu salario hoy fuera de $10,000 y no realizas aportaciones voluntarias, cuando te jubiles recibirás cada mes entre $2,000 y 3,500 pesos como pensión.
Ahorrar a meses con intereses significa que la inversión de dinero que hagas hoy, al llegar a tus 65 años generará intereses y te ofrecerá la vida que tú decidas tener.
Pero destinar una cantidad mayor al 6.5% de ley te beneficiará para tener un mayor rendimiento de tus ahorros y una pensión de calidad para cuando te jubiles.
Las últimas estadísticas de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) señalan que las aportaciones voluntarias representan el 1% del dinero administrado por las Afores y, a pesar de que la ley obliga un descuento del 6.5% del salario del trabajador que va a su fondo de ahorro para el retiro, al momento de su retiro, a los 65 años, la pensión que reciba equivaldrá a un 20% aproximado de su último sueldo.
Te recordamos que puedes hacer aportaciones voluntarias en 7-Eleven desde 50 y hasta 8,000 pesos, durante las 24 horas, los 365 días del año. La aportación no tiene costo y solo necesitas tu Clave Única de Registro Poblacional (CURP). También puedes hacerlo vía online, por domiciliación o en sucursales bancarias. Las aportaciones voluntarias te ofrecen la posibilidad de deducibilidad y atractivos rendimientos, dependiendo la institución.
3.- Salda deudas pasadas
Reducir total o parcialmente tus deudas te permitirá cumplir con más holgura con tus pagos en tiempo y forma y tal vez puedas comenzar el año en número verdes.
4.- Haz compras inteligentes
Considera los gastos necesarios para tener una cena de navidad y año nuevo de calidad. Gómez recomienda un “intercambio de regalos” para no sobrepasar tu presupuesto.
Además de las aportaciones a tu Afore, otros instrumentos de ahorro son el fondo de inversión (una buena opción a corto plazo, aunque sin mucho rendimiento), y el Plan privado de Pensiones (cuentan con él 1,976 empresas en el país, y es un fondo creado por la empresa para hacer frente a pago de pensiones o jubilaciones).
“En México no ahorramos ni obligatoria, ni voluntariamente. Mucho se piensa que es porque no queremos, pero también es porque no sabemos, o no sabemos formalmente”, señala Juan Verón, Chief Investment Officer de Principal Financial Group.
Según cálculos de esta institución, un empleado mexicano tiene que ahorrar entre el 14 y 16% de su salario durante toda tu vida laboral para obtener entre el 70 y 80% de tasa de reemplazo al momento de su jubilación. Con la afore tienes el 6.5%, por lo que restaría una aportación voluntaria superior al 7%. ¿Estás dispuesto a tomar esta inversión?
La consultora Resuelve tu futuro, especializada en el diseño de planes de ahorro, señala que entre un 20 y 30% de la población tiene la cultura y la necesidad de ahorro, sin embargo, estos datos están enfocados en aquellas personas que ahorran igual en su casa, en el banco o en una cuenta especial.
Fuente: AltoNivel