El marinista se ha apuntado ya como el virtual candidato del PRI a la diputación federal por el distrito número 7, con cabecera en Tepeaca.
El edil de Acatzingo, Carlos Alejandro Valdez Tenorio, se ha convertido en uno de los apoyos principales de Armenta, en la consecución de sus objetivos.
Son constantes los eventos públicos municipales en donde tiene una participación activa Armenta Mier y que no necesariamente obedecen a las responsabilidades del cargo que ostenta en el gobierno federal.
El más reciente de estos eventos se llevó a cabo el sábado pasado: una reunión con representantes de la Comisión Nacional del Agua en donde, de manera inexplicable, el actor principal fue el propio Armenta y no el delegado de la dependencia, Germán Sierra Sánchez.
El hoy funcionario federal, que ya gobernó el municipio en el trienio 1993-1996, tuvo una influencia decisiva en la victoria de Valdez Tenorio en el proceso electoral de julio de 2013 y espera reciprocidad ahora que perfila su proyecto político personal en la coyuntura de la elección federal del próximo año.
El edil financia además el “proyecto Armenta” a través de sospechosos pagos que se hacen desde la presidencia municipal a consultoras fantasma que cobran muy caro por sus supuestos servicios, pero nadie sabe exactamente la razón por la cual se les contrata.
Y es que, en la visión de Armenta y compañía, si quiere ganar la diputación va a necesitar sacar provecho de todas sus relaciones políticas y juntar la mayor cantidad de recursos que sea posible.
Vengan de donde vengan.
Todo parece indicar que el priista va a tener que enfrentar a uno de los candidatos consentidos del gobernador Moreno Valle, el actual titular de la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial, Mario Alberto Rincón González.
El funcionario estatal, sobra decirlo, tendrá el beneficio de poder financiar su campaña con el dinero del erario estatal que pueda desviar para este fin, lo que convierte la elección de Tepeaca en una guerra electoral de carteras públicas.
¿Cómo la ve?
Lo cierto es que los priistas ya operan con todo la elección del próximo año.
Tienen la enorme responsabilidad de sumarle curules cómodos al presidente Peña Nieto, cuya peor pesadilla sería coexistir con un congreso federal mayoritariamente opositor en la complicadísima coyuntura actual por la que pasa el país.
Más allá de los acuerdos que puedan existir entre niveles de gobierno para salir bien librados del proceso 2015, en el caso de Tepeaca parece que no habrá negociación posible.
En este municipio se verá quién tiene la mejor y más eficiente estructura de operación electoral y qué nivel de gobierno es más eficiente en el desvío de recursos públicos a favor de sus respectivos candidatos.
Cochinos contra marranos, se valen apuestas.
