Más allá de la confianza que puede haber en la investigación que realiza la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), lo importante es que está bajo el escrutinio de organismos internacionales y medios de comunicación, por lo que están obligados a realizar un trabajo equilibrado.
Esa fue la postura que externó la diputada federal, Roxana Luna Porquillo sobre la intervención de la CNDH en la investigación sobre lo sucedido el pasado 9 de julio en el kilómetro 14 de la autopista Puebla Atlixco.
Un investigación que ya obligó al secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas Rosas, y al Procurador del estado, Víctor Carrancá Bourguet, a comparecen ante el organismo federal para responder preguntas y entregar la información correspondiente y los peritajes realizados en el caso.
Ahí, el procurador del estado reconoció el pasado viernes que la tesis de que fue la onda expansiva de un cohetón fue lo que provocó las heridas y después la muerte de José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo, no es definitiva a pesar de que días antes, al presentar las conclusiones ante medios de comunicación el funcionario estatal afirmara que para la dependencia a su cargo esa era la causa de la muerte del menor y que se arribó a dicha conclusión tras revisar 98 dictámenes.
“Como pobladores ya entregamos todos los elementos para demostrar que hubo balas de goma y artefactos lanzados y también estaremos entregando peritajes para determinar la responsabilidad”.
Luna Porquillo informó que durante la semana ha acudido personal de la CNDH a Chalchihuapan para entrevistar a los pobladores como parte de la investigación que se realiza.
“Es importante que hayan llegado para poder construir una postura equilibrada pues si solo escuchan al versión el gobierno ya sabemos que van a decir”, sentenció la legisladora perredista.