Los bancos de reciente creación buscan tener una participación importante dentro del mercado de crédito para las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes), ya que consideran que es un negocio rentable, donde existe una gran cantidad de demanda insatisfecha, además de las ventajas y seguridad que dan las garantías de crédito de la banca de desarrollo.
De esta forma, las instituciones Banco Progreso Chihuahua, Banco Finterra, Banco Bancrea, Investa Bank y Bankaool, anteriormente Agrofinanzas Banco, han destinado su origen a satisfacer las necesidades de crédito de las Pymes, tratando de competir con los grandes bancos que tienen acaparado este segmento del negocio.
Francisco Meré Palafox, director general de Bankaool, dijo a EL UNIVERSAL, “estamos buscando a las Pymes, las cuales pensamos atenderlas con una oferta de valor agregado en el servicio y con productos adaptados a sus necesidades, ya que la oferta que existe actualmente es muy baja y con poca atención a sus verdaderas necesidades”.
Sin embargo, todos los nuevos bancos que se han creado en los últimos dos años han apostado a este mercado con la misma promesa de servicio personalizado y adaptado a sus necesidades, sin que hayan causado una diferencia en el sector bancario empresarial.
Los grandes bancos como BBVA Bancomer, Banorte, Santander y Banamex, tienen cerca de 70% del mercado, mientras que los instituciones medianas especializadas como Inbursa, Interacciones y Banco del Bajío, tienen 20%.
En el caso de Santander, a diciembre de 2013, la cartera de crédito para Pymes creció 26.2% de forma anual, que representa recursos por 41 mil 355 millones de pesos. Sin embargo, la cartera de Pymes representa sólo 11% del crédito, lo que demuestra la baja penetración que se tiene en este mercado.
De acuerdo con estimaciones de los propios bancos, existen en el país aproximadamente de 5 millones de Pymes constituidas de forma legal, de las cuales únicamente un millón son sujetas de bancarizarse, debido a que la mayoría de éstas no llevan un registro contable adecuado o no tienen la suficiente experiencia crediticia.
No obstante, los bancos de reciente creación esperan que la banca de desarrollo sea un detonante que permita incrementar el financiamiento a las Pymes, apoyada por los cambios en las leyes que promovió la Reforma Financiera.
“La Reforma Financiera podrá dar más dinamismo a los bancos de reciente creación, lo que podría dar una mayor competencia al reducirles el riesgo de impago, gracias a las garantías que se espera se detonen”, aseguró Alejandro García, analista de la calificadora Fitch.
Fuente: ElUniversalOnLine
