El programa “Beca un niño indígena” sí es apoyado por burócratas estatales pero “de manera voluntaria” y no por descuentos directos vía nómina, aclaró la 
presidenta del Sistema Estatal DIF, Martha Erika Alonso de Moreno Valle.
Dijo que solicitó una explicación al secretario de Administración, José Cabalán Macari, tras lo publicado en la columna Al Portador respecto a que el subsecretario técnico de la subsecretaria de Desarrollo Administrativo, Marcos Viveros Matamoros, envió oficios a empleados gubernamentales para notificarles las donaciones para el programa.
Según la titular de la dependencia que atiende el desarrollo integral de las familias, Cabalán Macari le aseguró que el subsecretario actuó a título personal y que el oficio sólo se difundió en la secretaría a su cargo como un simple exhorto para cooperar con el programa.
“No es un tema- el oficio- que se esté manejando en todo el gobierno. Pregunten a qué funcionario del DIF se le ha pedido un peso de su nómina. No es un programa en que se va a descontar un solo peso a ningún trabajador del gobierno del estado. Aquí quien quiera apoyar lo hace de forma voluntaria”, enfatizó.
Esto en el marco de la entrega de recursos del programa “De La Calle a la Vida” a los municipios de Puebla, Tehuacán y Cuetzalán. Se trató de una bolsa de 630 millones de pesos que serán destinados a habilitar espacios donde los menores aprendan actividades productivas.
