Además, no se puede entender que sea el propio secretario de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico, Pablo Rodríguez, quien justificó el cierre de una industria como Le Roy porque “quiere ser más competitiva” yéndose al estado de Morelos, según declaró a algunos medios.
Cuando el trabajo precisamente de dicho funcionario -se supone- es todo lo contrario. Es decir, atraer empresas, preservar el empleo, atender a los industriales, facilitarles la operación (que no implica eludir lo que marcan las diversas leyes), trabajar para que las empresas puedan ser competitivas en Puebla y no se vayan a otro lado.
Tan ignorante de la situación en Le Roy era Rodríguez Regordosa, que ni él ni el personal que redacta intentos de comunicados sabía dónde operaba la empresa, al confundir Cuautlancingo con Coronango, y luego al pretende enmendar su error, lo agrava al señalar que está en ambos municipios. (¿?)
El cierre de la fábrica, con seis años de operar en Puebla, tomó por sorpresa tanto al funcionario estatal como a la delegación de la Secretaría del Trabajo, los trabajadores denunciaron ante los medios que los obligaron a presentar “su renuncia” en lugar de liquidar a los 150 conforme a la ley.
Los obreros carentes de organización sindical, y poco conocedores de sus derechos aceptaron lo que les empresa quiso pagarles.
La mudanza de una empresa no se toma de un día a otro, lleva meses de análisis dónde invertir, analizar la oferta muy atractiva que les hico el gobierno morelense, ver las condiciones geográficas, de logística, costos; además la construcción de la planta y la contratación del nuevo personal.
Tan sólo las ofertas de empleo para la nueva planta en Yecapixtla, Morelos, empezaron a correr desde junio,
Si bien es cierto que en este año se registra una cierta desaceleración en la economía mexicana en general, lo cierto es que Puebla presenta altibajos en su actividad económica y una baja general en la generación de empleo desde marzo, pero la cancelación de plazas ante el Seguro Social se presentó en junio.
Y ahora se sabe que el desempleo creció en sólo un, cuando en julio 3 mil 811 poblanos se quedaron sin trabajo, para un total de 106 mil 844 en todo el estado, según el reporte de Inegi.
A menos, claro, que nuevamente salga Pablo Rodríguez a decir que esos 3 mil 881 poblanos “están de vacaciones” porque es la temporada de verano.
Según las proyecciones de algunos analistas, el último trimestre del año puede seguir la desaceleración de la economía, pese a la capacidad de producción que tiene el país, y aún así México en su conjunto crecerá un poco más que Brasil y Estados Unidos.
En el cas de Puebla, ya se sabe, es el sector automotriz el que mueve a toda la industria en el estado, y que tiene una considerable aportación a la economía, aunque es el sector terciario el que general el 60% del PIB.
Si la industria tiene limitaciones en su crecimiento, el sector comercio y servicios también está limitado, en la medida en que el consumo no es alentado con más empleo, mejor calidad del mismo con percepciones que permitan satisfacer las necesidades básicas de la población.
