Un albergue con capacidad para unas 250 personas es el único sitio que se encuentra preparado en Izúcar de Matamoros, para recibir a los 3 mil 500 habitantes de San Pedro Benito Juárez. Así lo constató Status dentro del simulacro de evacuación que realizó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y el gobierno del estado de Puebla ante una posible erupción del volcán Popocatepetl, y que duró más de 4 horas.
Las autoridades hicieron observaciones para la apertura de más espacios para recibir a más personas, mismos que tendrán que ser equipados incluso con sanitarios portátiles y regaderas, sin embargo el edil izucarense, Carlos Gordillo, dijo que no está dispuesto a gastar en simulacros sino hasta que se registre una verdadera emergencia o una erupción volcánica.
“El general está acostumbrado a trabajar dentro de los programas de DN-III, con lugares de máxima capacidad. Sin embargo aquí tenemos lo necesario y podemos habilitar los albergues adecuados en caso de necesitarlos. No podemos estar rentando sanitarios portátiles si no se van a ocupar”, argumentó.
Añadió que además del auditorio municipal se habilitarían como albergues el Centro Escolar y la Universidad Tecnológica de Izúcar de Matamoros, sin embargo no pudo detallar cómo operarían esos lugares.
Y es que durante el recorrido encabezado por el secretario General de Gobierno, Fernando Manzanilla Prieto, y el comandante de la XXV Zona Militar, Marco Antonio Barrón, este último realizó varias observaciones al alcalde sobre las carencias de los lugares y el limitado espacio del auditorio municipal.
Esto dentro del simulacro de evacuación de la junta auxiliar de San Pedro Benito Juárez, en el municipio de Atlixco, ubicada a 8 kilómetros del volcán. Ahí se congregaron alrededor de 100 elementos militares y personal de la Dirección de Protección Civil estatal, quienes realizaron el operativo en un tiempo estimado de cuatro horas.
Cabe señalar que el simulacro se realizó sin participación de la población para evitar alarma y sólo con la finalidad de medir tiempos y capacidad de respuesta ante un evento real.