-¡Muy buenos días! No es usted la señora Donovan a quien case hace dos años?-
Ella contestó:
-Efectivamente padre soy yo-.
El sacerdote preguntó:
-¿Y no han tenido niños aún?-
Ella respondió:
-No padre, aún no-
El padre dijo:
-Bueno, yo estoy yendo para Roma la semana entrante así que prenderé una vela por usted y su esposo-
Ella contestó:
-¡Oh padre, muchas gracias!-
Y ambos siguieron su camino
Años más tarde se encontraron nuevamente. El sacerdote preguntó:
-Bueno, señora Donnovan ¿Cómo se encuentra usted ahora?-
Ella contestó:
-Muy bien padre-
El padre preguntó:
-Por favor dígame, ¿Han tenido niños ya?-
Ella respondió:
-¡Oh sí, padre; 3 pares de mellizos y 4 criaturas más. En total 10-
El padre dijo:
-¡Bendito sea el Señor! ¡Qué maravilla! Y adonde está su amantísimo esposo?-
Ella contestó:
¡Camino a Roma a ver si puede apagar la pinche vela que usted prendió!-