La pobreza es un fenómeno complejo, multidimensional y heterogéneo tanto en sus causas como en sus efectos, por lo que no tiene una definición, medición ni conceptualización únicas, sin embargo, existen coincidencias en tanto se le vincula con la privación de los elementos necesarios para vivir, así como de los medios y recursos para alterar dicha situación.
En México, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) es la institución responsable de establecer los lineamientos y criterios para la definición, identificación y medición de la pobreza en el país.
El CONEVAL diseñó la Metodología para la Medición Multidimensional de la Pobreza en México, misma que determina dos espacios para su medición: i) dimensión asociada al espacio del bienestar económico cuyo indicador es el ingreso corriente per cápita y ii) dimensiones asociadas a los derechos sociales (educación, salud, seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, servicios básicos en la vivienda y alimentación).
De acuerdo con esta Metodología, una persona se encuentra en situación de pobreza multidimensional cuando no tiene garantizado el ejercicio de al menos uno de sus derechos sociales y sus ingresos son insuficientes para adquirir los bienes y servicios que requiere para satisfacer sus necesidades. La población que se encuentra en pobreza multidimensional se divide, a su vez, en: población en situación de pobreza multidimensional extrema y moderada.
Se han presentado estimaciones de la pobreza nacional y en las entidades federativas para los años 2008 y 2010. A partir de la divulgación del informe denominado Resultados de Medición de la Pobreza 2010, en Puebla se ha conocido una serie de comentarios relativos a las causas de la evolución y eventual disminución de la pobreza en este estado, tomando como base a 2008.
En 2008, 3.66 millones de poblanos (64.7%) se encontraban en pobreza multidimensional; 46.4% de la población en pobreza multidimensional moderada y 18.3% en pobreza multidimensional extrema, con lo cual la entidad ocupó el tercer lugar a nivel nacional entre las entidades con mayor pobreza.
En 2010, de acuerdo con las estimaciones del CONEVAL, 3.53 millones de personas (61%) se encontraban en condición de pobreza multidimensional; 46.1% en pobreza multidimensional moderada y 14.9 en pobreza multidimensional extrema.
Los cambios en los indicadores han generado debates en los ámbitos académico, político y de gobierno, que intentan, principalmente, explicar las causas y los responsables de que los estimadores de pobreza de la entidad hayan disminuido.
Sin embargo, el análisis de estos indicadores debe considerar no solo la información asociada con las estimaciones del CONEVAL sobre la pobreza y sus dimensiones, sino también los aspectos técnicos de la medición, sobre los cuales hasta ahora no ha existido suficiente discusión y debate. Esto es; en estadística todas las estimaciones de parámetros poblacionales que se realizan a partir de una muestra tienen un error asociado por haber considerado dicha muestra entre el universo de las disponibles. Las técnicas estadísticas buscan obtener los mejores estimadores posibles, mismos que deben cumplir con atributos ya determinados, entre los que destaca que el error de la estimación sea el menor posible.
Por ello, los estimadores de la pobreza que se obtienen son, tal y como su nombre lo dice, estimaciones y no valores exactos de cada variable e indicador ya que se calculan a partir de los datos de la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares, la cual capta información de una muestra de hogares del país.
De este modo, las estimaciones del porcentaje de la población en condiciones de pobreza en Puebla, 64.7 en 2008 y 61.0 entre 2010, al provenir de muestras, no representan el valor exacto del indicador para la población, sino el mejor estimador entre los estimadores posibles.
Para obtener conclusiones sólidas sobre los estimadores y los cambios de un año respecto a otro, se debe acotar el error en que se incurre, lo que se realiza mediante pruebas estadísticas puesto que la estimación puntual es insuficiente; cuando se tienen estimadores para dos poblaciones o, como en este caso, para dos periodos distintos, se aplican pruebas de hipótesis que tratan de probar si hubo diferencias en los intervalos entre los que, con cierto nivel de confianza, puede caer el valor exacto para cada población o periodo.
En el caso de los indicadores de pobreza multidimensional, en el Anexo Estadístico del Informe de Medición de Pobreza 2010 se presentan, además de las estimaciones de los indicadores de incidencia, profundidad e intensidad de la pobreza, sus pruebas de hipótesis y las conclusiones de dichas pruebas.
Los resultados e interpretaciones de la información estadística y las pruebas de hipótesis de los indicadores de pobreza multidimensional en Puebla, permiten saber que:
Aunque existe una tendencia a la reducción de la pobreza, estadísticamente no hay evidencia suficiente para afirmar que entre 2008 y 2010 disminuyó la pobreza en Puebla.
Sin embargo, estos resultados no implican necesariamente ineficacia para resolver la problemática de la pobreza en Puebla, ya que el entorno y condiciones del periodo se caracterizaron por una amplia volatilidad y vulnerabilidad ante choques internos y externos; prueba de ello es que en el mismo periodo el porcentaje de población en situación de pobreza aumentó al nivel nacional.
El porcentaje de la población en vulnerabilidad por ingreso se incrementó. Sin embargo, ello no se debe a que haya aumentado la proporción de la población con ingresos por debajo de las líneas de bienestar; se explica, principalmente, por la reducción en las carencias sociales de personas que en 2008 eran pobres multidimensionales y en 2010 dejaron de tener carencias sociales aunque se mantuvieron con niveles de ingreso bajo.
Respecto a los indicadores relacionados con el bienestar, no hubo cambio en los porcentajes de la población con ingresos por debajo de las líneas de bienestar y bienestar mínimo, mientras que al nivel nacional se incrementó significativamente el porcentaje de la población por debajo de ambas líneas de ingreso
En el periodo 2008-2010 hubo un avance en la reducción de ciertas carencias sociales, aunque no de todas las que incluye el indicador de pobreza multidimensional. Al considerar cada una de las dimensiones e indicadores asociados a carencias sociales, se pudo observar que, en términos estadísticos, no todas ellas experimentaron cambios en el periodo considerado; las carencias que tuvieron cambios significativos fueron acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social y acceso a los servicios básicos en la vivienda.
El gran tema pendiente de las políticas sociales y económicas de México y de Puebla sigue siendo mejorar el nivel de ingreso de los grupos de la población más desprotegidos; impulsar y fortalecer políticas y programas que, más allá de buscar el asistencialismo o la subsistencia, permitan generar cambios profundos que les garanticen una incorporación sustentada y sostenible a las economías locales y nacional que también requieren, con urgencia, ser atendidas.
