Tal como lo señalamos en este espacio el pasado 5 de septiembre la Canaco se convirtió en un terreno pantanoso y Arzimendi ya no irá por la reelección en su tercer año. (http://www.balance-financiero.com/detColumna.php?id=4237)
En estos días de septiembre los consejeros comprobaron los negocios particulares del flamante director José Antonio García Arévalo (el Conejo), impuesto por Arizmendi; además que cada vez son menos socios y los pocos que quedan se niegan a cubrir la cuota anual, acentuándose más la crisis financiera del organismo.
Incluso el propio Conejo aceptó todo lo señalado en Balance hace 15 días, de manejar sus negocios particulares desde el octavo piso del edificio empresarial, según la entrevista que concedió a Fernando Pérez Corona en el portal e-consulta el mismo martes 6 de septiembre.
Así, al ya no tener viabilidad alguna la dirigencia de Alfredo Arizmendi, los consejeros manejarán la Cámara en los siguientes cuatro meses, y proceden ya a conciliar intereses entre los grupos para ver quién(es) finalmente acepta(n) hacerse cargo de un organismo empresarial sumido en una serie de problemas que serán difíciles -no imposibles- de superar.
En febrero de 2012 deberán realizar la Asamblea anual y en ella elegir a un(a) presidente que concilie y saque del lodo a la Cámara más antigua del país.
Por cierto, Arizmendi ya hasta tiene preparado el reporte de lo que fue su fallida administración de dos años.
Y es que, coincidentemente Arizmendi entre el lunes 5 y martes 6 de septiembre pidió al personal de la Canaco realizar un “informe” de todas las actividades que se realizaron en este último año para comprobar asocios o no de la Cámara que sí había trabajado.
Pero, lo único que podía informar era de las juntas de la comisión ejecutiva o sesiones mensuales, y por supuesto el reporte financiero en número rojos que mensualmente entregó en dichas sesiones.
Es decir, no realizó ni un solo evento de promoción, capacitación o exposición.
Además, la página en Internet de Canaco que estaba en operación el martes 6 de septiembre, ayer domingo ya ni siquiera existe.
El presidente saliente finalmente comprobó lo que los mismos trabajadores de la Canaco le manifestaron en la carta que le entregaron el 30 de agosto: “… hemos seguido cada uno de sus proyectos, para intentar aumentar el ingreso de esta Institución, de las cuales se ha obtenido poco resultado”. (Sic)
En otros organismos empresariales también van por el cambio, al cumplirse el tercer año de quienes están al frente, y algunos de ellos tampoco entregarán buenas cuentas que ya luego comentaremos.
