Amnistía Internacional y el Episcopado Mexicano presentaron quejas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos en contra de elementos de la policía municipal de Puebla, luego de que ayer retuvieron por más de una hora al sacerdote Alejandro Solalinde Guerra, promotor de la caravana “Paso a Paso Hacia la Paz”, que esta mañana partirá con rumbo al Distrito Federal.
La tarde de este domingo se realizó un operativo policiaco en la Parroquia de la Asunción, ubicada en la 45 norte 206, donde llegaron ocho camionetas de la Policía Municipal, además de otros uniformados que no se puedo constatar si se trataban de policías estatales o federales.
En el lugar se registraba la concentración de la Carvana por la Paz, donde más 300 migrantes centroamericanos y activistas, esperaban la llegada de otro número igual de compañeros que venían rezagados.
Los uniformados justificaron su presencia con una llamada anónima que alertó sobre la presencia de personas que portaban armas largas.
Braulio Antonio González y Antonio Cabrera Toledo, elementos de seguridad pública de Oaxaca, mostraron las armas, los permisos de portación y su oficio de comisión asignado por el gobernador de Oaxaca, Gabino Cue, para escoltar al sacerdote.
Pese a ello fueron trasladados a la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPTM), donde Solalinde Guerra refirió que cuenta con escoltas debido a que ha recibido amenazas del crimen organizado, medida que autorizó Amnistía Internacional y el Episcopado Mexicano.
Además el sacerdote aseguró que el gobierno del estado de Puebla, sabía que se trasladaba con personal de seguridad otorgado en Oaxaca, gobierno que tuvo que intervenir para que los dos policías estatales fueran liberados.
El gobierno del estado refirió que se trató de una detención del orden municipal, mientras que la SSTM, aseguró mediante un comunicado de medios que la acción sólo fue un protocolo de seguridad derivado de una denuncia ciudadana.
“El sacerdote José Alejandro Solalinde acudió también de forma voluntaria para conocer la situación de los involucrados, constatando los hechos y el actuar de los elementos locales.
La SSPTM refrenda su compromiso de atender los reportes efectuados por la ciudadanía en pleno respeto a los derechos humanos de las personas, para salvaguardar la integridad física y patrimonial de quienes viven o transitan por territorio poblano. ”
Centroamericanos vistos como criminales
Los migrantes centroamericanos que atraviesan Puebla se enfrentan al crimen organizado aliado con las autoridades de los tres niveles de gobierno, dijo el padre Gustavo Rodríguez, responsable diocesano de Atención a Migrantes de la arquidiócesis de Puebla.
En las parroquias poblanas donde se da hospedaje humanitario a quienes intentan llegar a Estados Unidos, no se llevan un registro del número de personas que atienden, pero cada vez se detectan más violaciones a los derechos humanos.
Sin embargo sacerdote consideró que de cada 10 migrantes, 9 han sido asaltados y extorsionados por pandillas de Maras Salvatruchas apostados en la frontera sur de México, por los agentes de migración y los ministerios públicos; y en el peor de los casos son desaparecidos por el narcotráfico.
Añadió que los centroamericanos son vistos como delincuentes, además de que los propios alcaldes de municipios como Zoltepec, Amozoc, y de juntas auxiliares poblanas como San Felipe Hueyotilipan y San Pablo Xochimehuacán le han referido que grupos delincuenciales los obligan a entregar a los migrantes “Me dicen: cooperamos o nos dan cuello”.
