A pesar del crecimiento en el número de tarjetas de débito, se usan poco más de la mitad. De acuerdo con información del Banco de México, entre el segundo y cuarto trimestre de 2010, este tipo de plásticos crecieron cerca de 4 millones para totalizar en 75 millones.
Sin embargo, sólo se utilizan 37 millones. El instituto central detalló que en un año se reportó un crecimiento de cerca de 10 millones de plásticos de débito.
Entre octubre y diciembre se contabilizaron 173 millones de operaciones en terminales punto de venta con tarjetas de débito, cifra mayor a la que se reportó entre abril y junio del mismo año, cuando llegó a 139 millones.
El importe de las transacciones ascendió a 87 mil 806 millones de pesos, saldo también mayor al que se observó entre abril y junio de 2010, cuando sumó 66 mil 583 millones de pesos.
En el caso de las operaciones en cajeros automáticos con débito, el monto llegó a 341 millones, cifra mayor a la que se reportó en el lapso abril a junio.
El Fondo de Infraestructura para Medios de Pago Electrónicos (Fimpe) recalcó que es primordial acrecentar el uso de las tarjetas de crédito y débito, ya que ello permitirá avanzar en la modernización del sistema financiero.
Por su parte, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) detalló que al cierre de diciembre, se registraron 25 millones 485 mil cuentas de ahorro.
Puntualizó que en este periodo se registraron 30 millones 408 mil cuentas de nómina, 35 millones 390 mil contratos de cuentas de cheques a personas físicas y 2 millones 227 mil a personas morales.
La mayoría de este tipo de captación incluye tarjetas de débito.
Datos de la Condusef revelaron que es necesario aumentar el uso de los medios de pago electrónicos, ya que ello redundará en menores costos y mayor seguridad para los usuarios.
La dependencia estimó que 80% de los mexicanos ahorran fuera del sistema financiero y una parte importante de éstos lo hace abajo del “colchón.