19-04-2024 04:36:14 AM

Con mantas de rechazo y bromas, despiden a Marín

Ayer, último día del mandato de Mario Marín Torres,  -apodado y conocido a nivel internacional como “el góber precioso” por haber perseguido y encarcelado a la periodista Lydia Cacho-, realizó su última gira de trabajo en el municipio de Eloxochitlán, el más miserable del estado y uno de los 100 más pobres del país.

Por la mañana recorrió algunos noticieros radiofónicos donde dijo que esperaba no haber defraudado a los poblanos y haber cumplido con los compromisos pactados con sus gobernados.

En tanto Marín se despedía mediáticamente, los poblanos reían con chistes que circulaban en las redes sociales al tiempo que el ex secretario de Gobernación, Valentín Meneses, insistía que el caso Cacho fue la mentira del sexenio.

Medios de comunicación nacionales como los diarios Excelsior y Reforma y agencias internacionales como EFE dedicaron artículos al adiós del “góber precioso”.

“¿Qué pasó, mi góber precioso… ¡tú eres el héroe de esta película, papá!”, fue la frase que le dirigió el empresario Kamel Nacif y  que le valió el apodo apenas a diez meses de su llegada al poder en 2005.

Nacif -conocido como “El rey de la mezclilla” por su emporio textil- fue acusado en el libro de Cacho “Los demonios del edén” como parte de una red de explotación sexual de menores en el Caribe mexicano.

Políticos y empresarios se unieron para dar un escarmiento a la periodista, situación que se descubrió por filtraciones telefónicas que fueron escuchadas con Carmen Aristegui y publicadas en el diario La Jornada.

Aquí un par de chistes que circularon en la red:

Un señor en una tienda de disfraces:

-“Quiero un traje de cura y una máscara del Gobernador Mario Marín”

-“¿Y eso para qué?”

-“¡Para disfrazarme de Reverendo Hijo de la Chingada!”

Un señor va a Casa Aguayo el 1 de Febrero de 2011 y le pregunta al portero por el gobernador Mario Marín.

Éste le contesta que, Marín ya no es más el gobernador de Puebla; el señor pide disculpas, agradece y se va.

Vuelve al otro día, encuentra al mismo portero, le hace la misma pregunta… El portero vuelve a contestarle que Marín ya no es el gobernador.

La misma escena durante diez días consecutivos.

El portero, ya aburrido le dice al señor:

-“Pero si ya le dije, carajo, que Marín ya no es el gobernador!” …

-“Ya lo sé, ya lo sé!. Pero es que se siente tan bonito escucharlo…!”

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