A una semana de la jornada electoral los dirigentes del PRI y PAN, Alejandro Armenta y Rafael Micalco, se llamaron mentirosos y denunciaron que sus respectivos candidatos enfrentarán una elección de estado porque, tanto el gobierno federal como el estatal, tienen metidas las manos en la contienda a través del desvío de recursos del erario en apoyo a los aspirantes.