Un gran “negocio de saliva” es lo que ha hecho el empresario Ricardo Henaine Mezher con el aeropuerto “Hermanos Serdán”.
Y es que el concesionario de la terminal aérea es el momento en que en lo personal no ha desembolsado un peso y la mayoría de los recursos que han fluido tienen como origen a las gestiones de los gobiernos federal y estatal.
Lo peor es que las tarifas que cobra a las aerolíneas por el uso de la terminal resulta leoninas, lo que ha provocado –al margen de la crisis financiera mundial- el hartazgo de las empresas.
Ya empezó este año la gradual cancelación de aerolíneas del uso del “Hermanos Serdán”. Publicó e-consulta una gráfica, acompañada de una nota firmada por Efraín Núñez, donde revela la suspensión definitiva de vuelos y operaciones:
Aeroméxico canceló los servicios Puebla-Nueva York; Puebla-Los Cabos (conexión en Monterrey); y Puebla-Tampico (conexión en Monterrey).
Alma hizo lo propio con el vuelo Puebla-Toluca; Puebla-Tuxtla Gutiérrez. Y con conexión en Toluca, Puebla-Torreón, Puebla-Campeche, Puebla-San Luis Potosí, Puebla-Aguascalientes, Puebla-Ciudad Victoria, Puebla-Ciudad Juárez, Puebla-Mazatlán y Puebla-Puerto Vallarta.
A Volar, Aerocalifornia y Aladia dejaron de operar.
Volaris sólo mantiene operaciones con vuelos de Puebla a Hermosillo, Tijuana y Cancún.
Continental Exprés sigue con el vuelo Puebla a Nueva York con escala a Houston.
La Operadora Estatal de Aeropuertos S.A. de C.V. (OEA) es una empresa con participación estatal mayoritaria (51 por ciento) creada el 23 de febrero del año 2000. Desde el 1 de enero de 2001, la paraestatal tiene bajo su cargo la operación y el desarrollo de proyectos para el desarrollo del Aeropuerto Internacional “Hermanos Serdán” en Huejotzingo, Puebla.
Desde sus orígenes tenía comprometida una inversión inmediata por 13 millones de dólares y un Plan de inversiones de 185 millones de dólares, el cual quedó atado a la formalización de Puebla como sede permanente del ALCA.
METAS INCUMPLIDAS
El problema es que la realidad es muy necia y esta paraestatal resulta inviable para un Estado como Puebla que requiere una administración de nueva generación capaz de manejar los recursos con eficiencia.
Datos oficiales revelan que al año opera al 17 por ciento de su capacidad instalada en el tránsito de pasajeros con 87,000 personas.
Realiza 12,000 operaciones anuales, lo que equivale al 19 por ciento de su capacidad. Tiene apenas cinco vuelos comerciales diarios
El gobierno de Melquiades Morales desarrolló el Proyecto de Modernización y Plan Maestro del Aeropuerto Internacional Hermanos Serdán, cuyos resultados visibles se palparían en el 2003. ¿No estamos en el 2008?.
Por lo pronto, Puebla vuelve a ser víctimas de negocio de saliva o de un descarado salivazo financiero, donde con espejitos empresarios como Peralta y Henaine engañan con inversiones.
Desde que Melquiades les dio el 49 por ciento de las acciones del aeropuerto poco, por no decir nada, han hecho por el Hermanos Serdán.
Es sin duda, el primer caso en el mundo de un “elefante blanco volador”.
Expertos financieros concluyeron que la conformación accionaria de la paraestatal resultó muy ventajosa para los empresarios poblanos en detrimento del Estado.
Y es que en el sexenio anterior hubo otros ejemplos de “salivazos financieros”: Hyundai, Motorola y Nokia.
De hecho, Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) tiene clasificado al Hermanos Serdán como terminal de alcance mediano.
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