Por Alejandro Mondragón
Sergio Salomón Céspedes Peregrina rinde su segundo informe de labores.
El último eslabón de una cadena maldita para gobernantes, durante un sexenio de pesadilla.
En estos seis años hubo 6 gobernantes: Martha Érika Alonso, Jesús Rodríguez Almeida, Don Guillermo Pacheco Pulido, Luis Miguel Barbosa Huerta, Ana Lucia Hill y Salomón Céspedes.
Y el último de la fila entrega las mejores cuentas. Obras ejecutadas, un nuevo rostro en la infraestructura educativa y urbana.
Por su lealtad y trabajo fue invitado a laborar con la presidenta Claudia Sheinbaum al Instituto Nacional de Migración.
Sergio Salomón será el único gobernante contemporáneo en no ser repudiado o señalado.
Mariano Piña Olaya acabó en polémica de corrupción por la venta de los terrenos de la Atlixcáyotl al empresario Kamel Nacif Borge.
Manuel Bartlett, en su último día de gobernador, se fue al hotel más cercano a la autopista que conduce a la Ciudad de México para irse.
Melquiades Morales, quien llegó con las más elevadas expectativas populares jamás pudo superar el sismo y las inundaciones de su primer año, 1999. Además, la presencia de su familia en negocios y moches ocasionó que tardara años en que se olvidaran de ello, tanto poblanos como poblanos.
Mario Marín terminó de impresentable para el futuro, tras el escándalo de las grabaciones con Kamel Nacif, y contra la periodista Lydia Cacho.
Rafael Moreno Valle y sus tres E: encierro, entierro o exilio acabó un sexenio que, si bien puso a Puebla en la órbita de la transformación, la persecución y derroche le pasaron factura. Un 24 de diciembre la aeronave en la que viajaba cayó y ahí murió calcinado con su esposa, la entonces gobernadora.
Con Luis Miguel Barbosa se vivieron momentos de tensión política, encono y encarcelamiento. Murió un 13 de diciembre, mes fatídico y día en que hoy estaría concluyendo su mandato.
Sergio Salomón tendió puentes, salió a los pueblos, recorrió plazas públicas, se liberó de cargas e hizo obras.
Y lo más importante: cumplió acuerdos.
Seguro pasará a la historia como el gobernador más legitimado en los hechos, no en las urnas.
Un fenómeno político para estudiar.
