Karina Fernández |
La diputada local del PAN, Mónica Rodríguez Della Vecchia levantó la mano para dirigir al partido, ofreciendo apertura a distintos grupos y no a uno solo reducido, como se observó para el proceso electoral de este año.
La panista se pronunció porque Augusta Díaz de Rivera termine su gestión al frente del Comité Directivo Estatal, pero antes, convoque a una sesión del consejo estatal para analizar las decisiones que se tomaron para la elección de este año en la que el PAN retrocedió en votación.
“En este momento tenemos que hacer un análisis al interior del partido y más que repartir culpas, hay que ver los resultados (…) hasta no entender que un grupo reducido no puede ganar una elección, y que todos los liderazgos se tienen que tomar en cuenta, esto seguirá sucediendo”.
Rodríguez Della Vecchia planteó que, rumbo al 2027, el PAN evalúe su política de alianzas, que poco ayudó al partido en esta elección. También su apertura pues dijo que un reclamo constante fue la cerrazón para acceder a espacios.
“El PAN tiene que estar abierto a todos los liderazgos, piensen o no como, eso sueño, donde todos quepamos y tengamos una oportunidad, y no agrandarla posiciones de privilegio para amigos y familiares; si queremos hacer la renovación y ser agentes de cambio hay que participar”, planteó.
En este mismo sentido, y mediante redes sociales, el malogrado aspirante de la oposición para alcalde de Puebla, Mario Riestra Piña también solicitó que se convoque a una sesión del Consejo Estatal para hacer un análisis y autocrítica sobre el reciente resultado electoral.
De inicio, se pronunció porque el PAN recupere sus procesos democráticos internos, aunque su candidatura fue producto del dedazo; se abra a los jóvenes y sociedad, reflexione sobre las alianzas y sea incluyente y plural.
