Por Alejandro Mondragón
Mientras el rector Alfonso Esparza, anda metido en el despojo del negocio del futbol Lobos a la comunidad universitaria, la BUAP es ya territorio Morena.
Se equivoca el Tío Poncho respecto a que la ola pejista lo favorecerá en los próximos años por la vía de Francisco Vélez Pliego.
En realidad, desde diversos sectores académicos se ha fortalecido la figura del economista Eudoxio Morales, muy ligado a los intereses del grupo de Alejandro Armenta Mier, quien ya vio a la BUAP como factor clave para su proyecto por la gubernatura en seis años.
El simulador electoral que le dio 81 por ciento de los votos a Andrés Manuel López Obrador en realidad disfraza una amplia simpatía por Luis Miguel Barbosa y los abanderados al Senado en la comunidad universitaria.
La BUAP es territorio Morena, gracias al morenovallismo de Alfonso Esparza, quien –empero- tampoco oculta el fastidio de que lo liguen como parte del rebaño del #GoberBala.
En tanto los enemigos de Moreno Valle recuperan política e ideológicamente a la BUAP, el rector anda metido en el negocio del futbol para despojar del equipo a la comunidad.
Sería fundamental que exhibiera los términos del contrato formalizado con Mario Mendivil y su consuegro, José Antonio Álvarez, para hacerse cargo financiera y deportivamente del Club Lobos.
Esparza tendría que explicar cuánto le toca dentro del porcentaje que lleva Juan Carlos Bozikian, principal consejero, socio y contratista de la BUAP.
La comunidad tiene el derecho de saber si es cierto que después de 2 años, Lobos puede dejar la plaza en Puebla y salir a otro estado.
Y que en un año será vendido para garantizar su permanencia y luego irse de Puebla.
Los 6 millones de dólares que pagaron por la permanencia del plantel es una ganga por dos razones. Hay 4 millones de billetes verdes de patrocinios y transmisiones de televisión, los cuales irán a fortalecer al plantel en los 2 años.
El punto es que ya tienen ofertas para el próximo año, que compren el equipo en 15 millones de dólares capitales nacionales ligados al futbol.
Negocio redondo donde las ganancias se irán con Esparza y el recuerdo quedará con una BUAP que aúlla ante tanto saqueo.
Ello explica su nuevo color Morena.
En la BUAP ya no importa la ideología, sólo el dinero.
Los universitarios tienen el derecho a conocer el contrato donde la BUAP pierde a los Lobos, gracias a su venta a particulares.