Por Alejandro Mondragón
Ricardo Anaya ya confirmó que el jefe político en Puebla para él, candidato presidencial del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, y los abanderados del Frente, es Rafael Moreno Valle.
Quien lleva la batuta electoral es Martha Érika Alonso.
¿Y el gobernador Antonio Gali Fayad, mister Anaya?
La gira de Ricardo Anaya sirvió para que le quedara claro que en Puebla necesita de Moreno Valle, pero también mostró que el ex gobernador ya no tiene ningún pacto con José Antonio Meade, candidato de Peña Nieto a Los Pinos.
Rafael se subió al carro de Ricardo y éste no tuvo el menor rubor de ubicarlo como el jefe político en Puebla, a quien ve en privado y acuerdan no salir juntos en público para no ocupar el espacio que ya tiene Martha Érika.
Diría un morenovallefóbico, en realidad no sale en público con Rafael porque se ha convertido en un impresentable, como Mario Marín. ¿Quién lo iba a pensar?
Lo cierto es que Anaya ninguna línea dedicó a Gali, porque para él quién tiene en el poder es Moreno Valle, el mismo que cedió la batuta a su esposa.
Resulta muy extraño que se haya olvidado del gobierno panista en Puebla, porque Anaya ha sido cuidadoso.
Otra lectura es que quiso mandarle el mensaje a Peña Nieto, en el sentido de que Moreno Valle ya no le pertenece, sino que ahora forma parte de su rebaño, porque le ha dado tooooodo lo que le ha pedido.
Un peñista ladilla también podría afirmar: es la avanzada de Peña en el PAN para una alianza con el PRI contra López Obrador.
La política también es mensaje.
