Por Shanik David
La falta de difusión e información sobre las candidaturas independientes y el proceso de recolección de firmas, ha ocasionado que en algunos fraccionamientos de la ciudad de Puebla los aspirantes hayan sido sacados por elementos de seguridad privada a solicitud de los propios vecinos.
Esto le sucedió la semana pasada a Juan Manuel Vega Suck, aspirante por el distrito XVII de la ciudad de Puebla, quien fue expulsado de zonas como Las Ánimas y Estrellas del Sur, lo cual imputó a la falta de conocimiento de los ciudadanos y de apoyo que padecen los aspirantes independientes por parte de las autoridades.
“El IEE no nos facilita o facilitó en su momento con el conocimiento hacia los ciudadanos para que pudiéramos recabar el apoyo”, comentó, lo cual se ve reflejado en que la gente cuando les piden sus firmas “creen que estamos molestándolos o creen que por vivir en una zona privilegiada les molestamos”.
Incluso comparó que mientras el Instituto Nacional Electoral sí ha lanzado campañas para informar a los ciudadanos el alcance de las firmas de apoyo para los aspirantes independientes -es decir, que no compromete al voto y que los datos personales están resguardados-, en el caso de la instancia estatal no se ha tenido una difusión similar lo cual complica el proceso.
Otra parte del problema, continuó el aspirante, es que hay una desconfianza generalizada por parte de los ciudadanos hacia todo lo que tenga que ver con política, pues los representantes de partidos políticos sólo les prometen cosas cuando se acercan las elecciones y no los vuelven a ver.
“No abren la puerta porque no quieren tener relación con lo político, y aunque no es nuestro trabajo recuperar la confianza que han destruido los partidos políticos, estamos haciendo nuestro mayor esfuerzo”, por lo que falta que haya también apoyo de parte de las instancias electorales e incluso del ayuntamiento de Puebla para que haya mayor difusión, insistió Vega Suck.
Pese a estas dificultades, estimó que en la primera semana de recolección de firmas logró juntar alrededor de 700, lo cual supera lo que se había estimado previamente, debido a que su equipo sabía que “la gente iba a estar renuente”.
