Por Shanik David
La tipificación de todos los homicidios dolosos de mujeres como feminicidios, tal y como propuso el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Jorge Aguilar Chedraui, no es la mejor salida para atender la violencia que sufren las mujeres en Puebla, pues esta es sólo una medida reactiva, consideró la senadora Lucero Saldaña Pérez.
“Los homicidios en contra de las mujeres, cuando efectivamente sean con esa característica de vulnerabilidad por cuestiones de género son feminicidios” puntualizó la militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y dado que hay características clara que definen este delito, inscribir otro tipo de incidentes no sería lo más favorable.
Explicó que uno de los principales problemas que se tiene en la entidad es que las autoridades sólo reaccionan ante los hechos de violencia, pero que no se tiene una planeación adecuada en materia de prevención, lo cual derivó a que las recomendaciones que emitió la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia en contra de las Mujeres (Conavim) se “quedaran en el tintero y no se ven acciones de políticas públicas concretas”.
Ante esto, indicó que en vez de generalizar los feminicidios se deberían acatar que emitió la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) desde 2015 para la investigación y aplicación de justicia con perspectiva de género, lo cual, entre otras cosas, ayudará a evitar que se revictimice o se responsabilice a las mujeres de la violencia que sufren.
Sin embargo, comentó que en el caso de Puebla no se tiene la capacitación adecuada para los funcionarios de las áreas encargadas de impartición de justicia para la aplicación de estos criterios, pues incluso se dificulta cuando una mujer decide acudir a denunciar alguna agresión que sufran.
Por esto, consideró que la propuesta hecha por el coordinador de los diputados del Partido Acción Nacional (PAN) es oportunista y tardía, pues a pesar de que desde hace cerca de dos años se ha exigido que se emita la alerta de género en Puebla, el Congreso a evadido el tema.
Reconoció que existe cierta desinformación en relación a lo que implica la alerta de género, pues “no es tener a un policía en cada esquina cuidando a las mujeres”, sino que más bien es un mecanismo de coordinación entre los tres niveles de gobierno para la definición de campañas y políticas públicas que ayuden a “prevenir y no reaccionar”.
Y aunque existe un temor por parte de la clase política para reconocer la necesidad de la alerta de género, comentó que ya ha sostenido reuniones con el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para analizar el tema.
¿Qué es la investigación con perspectiva de género?
A finales de 2015 la SCJN emitió el Protocolo para Juzgar con Perspectiva de Género, el cual incluye algunos de los elementos que deben ser tomados en cuenta en casos de violencia en contra de mujeres y grupos que en condiciones de vulnerabilidad por cuestiones de género -homosexuales, transgénero, etc.-.
En general, se señala que esta método de investigar y juzgar busca aplicar los estándares nacionales e internacionales de derechos humanos de manera que se garantice un acceso a la justicia sin discriminación hacia las víctimas.
Para esto, se proponen una serie de puntos que se deben cumplir al momento de iniciar un proceso en el cual se vea involucrada una mujer o una persona que se encuentre en condiciones de desigualdad por razones de género.
Entre estos se establece que se debe identificar si hay una relación desequilibrada de poder, en donde la víctima esté en condiciones desfavorables por cuestiones de género, sexo u orientación sexual; además se plantea que se deben leer los hechos “sin estereotipos discriminatorios y de acuerdo al contexto de desigualdad verificado”.
Como parte de esta forma de investigar se debe verificar la existencia de estereotipos en la norma o en el actuar de las autoridades y determinar la manera de combatirlos, además que se debe usar un lenguaje incluyente, entre otros puntos.