Por Alejandro Mondragón
“Nos obligan a tener relaciones sexuales con directivos de la BUAP.
“Sobornan a todos y amenazan a familiares de que si denunciamos nos irá mal, pues tienen toda nuestra información personal en Administración Escolar.
“Hay toda una red de universitarios que anda a la caza de estudiantes, las acosan, sobornan y amenazan para tener sexo”.
Se trata de la protesta de algunas alumnas que han enfrentado todo un infierno al interior de la BUAP, durante el mandato del rector Alfonso Esparza.
No denunciaron antes porque querían evitar que dañaran a su familias y por la misma vergüenza de ser acosados. Hoy, levantan la voz.
Existen 4 casos documentados en los que el secretario del Consejo Universitario, Julio Galindo, figura como el último eslabón de la cadena de acosadores de jovencitas.
“Monta un operativo con un equipo que se dedica a buscar, acomodar e incitar al abuso de alumnas. Su principal operador era Carlos Pérez Medina, mejor conocido como El Papirrín, quien más tarde fue relevado por Raúl Gálvez con ayuda de una mujer cercana al rector Esparza, Monserrat Macías Jiménez.
“Ambos defienden y han intervenido incluso a favor de narcomenudistas en Ciudad Universitaria, como Anthony Sankey Alamilla e Ivo Masini Antonio de 20 años de edad y Edgar Matamoros Morales de 22”.
“El segundo operador al mando de la Secretaría Técnica de Julio Galindo es José Garrido, quien procura jóvenes para que tengan encuentros con Alfonzo Esparza.
Incluso, “ya van dos acusaciones de consejeras que han señalado ser forcejeadas y tocadas por Julio Galindo en su oficina, en compañía del tesorero Óscar Gilbón.
En un texto enviado a Al Portador se expone más:
“Por qué seguir soportando esto, por qué tenerles miedo a estos malditos acosadores, sabrá dios si han obligado a mas alumnas a realizar porquerías con directivos de la BUAP”.
Las estudiantes están dispuestas a reclamar la destitución de los funcionarios de la BUAP más cercanos al rector Esparza, quien insiste en su reelección.
El Tío Poncho se siente protegido y considera que tiene en la bolsa su reelección. Quién sabe qué vaya a pasar con las denuncias de favores sexuales para su grupo, a través de explotar jovencitas.
Si Esparza tuviera dignidad dejaría la BUAP, mientras las autoridades investigan a todo su clan.
¿Cuántas menores de edad no caen en sus redes?
Está claro que este tema espinoso se arrastra desde otras administraciones.
En el documento que obra en poder de este reportero se indica que además Galindo, Macias y Gilbón son los principales sobornadores de Esparza en el Consejo Universitario, donde se le aprueba al rector todo mediante la corrupción con dinero, viajes, becas o canonjías académicas a los consejeros.
Hay lista, nombres, teléfonos y tipo de favores políticos, económicos y sexuales.
Evito los nombres de las universitarias que tienen que padecer las depravaciones del grupo en el poder de la BUAP hasta que formalicen la denuncia y el tema se encause por el ámbito penal.
“Qué asco de personas, vergüenza me da decir que soy académica de esta universidad, y peor aun, queriendo expresar lo que siento y con amenazas me tienen”.
LA PANDILLA
Julio Galindo, secretario técnico del Consejo Universitario, está casado con la sobrina de Alfonso Esparza, Susana Hernández. Fue director de desarrollo e integración estudiantil.
Juan Carlos Pérez “El Papirrín” cuenta la leyenda que algún día estudió computación, siempre sacaba miles de pesos para apoyar a consejeros (a cambio de su lealtad) y vinculaba los recursos con los operadores de Enrique Agüera para apoyar al director que se le indicara.
Siempre daba becas y condonaciones a los que lo apoyaban o a los que vendían su voto. En diversas elecciones organizaba borracheras a profesores y consejeros universitarios, donde proliferaban prostitutas.
Actualmente sigue en su puesto de operador político, pero ahora en la Facultad de Derecho, tenía un salario que ascendía a 6 becas al mes (como 4 mil 200) y dicen que ahora ya esta en nomina de la BUAP, debido a sus servicios como porro, amedrentador de estudiantes e infiltrado en casas de estudiantes y cosas por el estilo.
LOS FOCOS ROJOS
A mediados de marzo de este año, un grupo estudiantes protestó públicamente por la conducta acosadora y misógina de académicos. Aquí algunos testimoniales sobre los profesores y académicos que abusan.
Esto opinan de:
1. Rafael Aluni Montes, Psicología Clínica:
“Aluni me hostigó durante la clase de enfoques contemporáneos en psicoterapia, insistía en vernos a solas, jamás volví a tomar clase con él, es mi tutor macho acosador de mierda”.
2. Isauro Carranza y Miranda, Psicología Organizacional:
“Isauro me dijo: ‘no cambies, sigue así, sigue haciendo ejercicio, consérvate’”. “En cuarto cuatrimestre, al final de la entrega del trabajo me dijo: ‘para celebrar te invito unas cervezas sin que se enteren tus compañeros ‘¿no tomas?”.
“Me encontraba en el balcón de la facultad hablando con el profesor Isauro acerca de mi materia, cuando me mostró de manera casual la fotografía de una mujer en bikini diciéndome: ‘mira las cosas que me envían de repente’”.
3. Gilberto Islas Cruz, Psicología Clínica:
“Me agarró los huevos en el pasillo, aun siendo yo hombre me paralicé y no supe qué hacer”.
4. Ricardo de la Rosa Huitziltepec, Inglés:
“A las estudiantes les mandaba mensajes con doble sentido y las invitaba a salir para ayudarlas con su calificación”.
5 y 6. Vladimir Villegas y David Ramírez:
“Son unos machos misóginos”.
7. Alejandro Pérez Vicuña, Administración de Empresas:
“Me acosaba en el salón y me seguía, me quería llevar a mi casa”.
8. César Cansino, Derecho:
“Dice que si no queremos que nos violenten no nos expongamos; cuenta chistes machistas en clase”.
Su denuncia mereció el desinterés de la mayoría de los medios de comunicación, muy afectos a darle trato de intocable a la BUAP que encabeza Esparza.
A ver qué dicen ahora sus aliados, porque es apenas la punta del iceberg.
Que la euforia del fútbol no nuble la dignidad de la comunidad universitaria.
