Por Shanik David
El hecho de que la Coordinación de Transparencia de la administración estatal sea regida por una Junta de Gobierno, que estará por encima de la directora del organismo, representará un obstáculo para la rendición de cuentas, lamentó Cuauhtémoc Cruz Isidoro, integrante del Capítulo Puebla de la Asociación Mexicana del Derecho a la Información.
Refirió que el hecho de que José Antonio Gali Fayad hubiera nombrado a María del Carmen Leyva Bathory como titular de la coordinación fue recibido como una decisión positiva pues ella demostró en su momento su experiencia y capacidad en su paso por la administración de Eduardo Rivera Pérez y del propio Gali Fayad en el ayuntamiento de Puebla, por lo que se tenía una buena perspectiva sobre el papel que desempeñaría ahora en el gobierno del estado.
Sin embargo, con la definición de la Junta de Gobierno se buscará “amarrarle las manos” a la exfuncionaria municipal, pues decisiones como los lineamientos de actuación, presupuesto y nombramientos quedarán en manos de ésta.
Además, la decisión de que fuera el jefe de la oficina del gobernador quien presida esta junta representa un gran riesgo, pues Javier Lozano Alarcón es un personaje que se ha distinguido por sus declaraciones en contra de una verdadera política de rendición de cuentas.
Esto lo calificó como “preocupante” pues el papel que desempeñará Lozano Alarcón va más allá de loq que desempeña normalmente el jefe de la oficina del gobernador y hasta en los temas de transparencia tendrá incidencia.
“Con estos antecedentes qué podemos esperar sobre cómo se van a resolver temas controversiales como los PPS y fideicomisos”, por mencionar algunos”.
Pero no sólo la presencia de Lozano Alarcón es un foco rojo, sino que el hecho de que los titulares de las secretarías de Infraestructura, Transportes y Movilidad, y de Finanzas y Administración funjan como vocales también pondrá barreras para la rendición de cuentas, pues algunos de los temas más cuestionados, como la deuda oculta o el sobrecosto de las obras, están relacionados con el ejercicio de estas dependencias.
Por esta razón, consideró que si bien uno de los compromisos de Antonio Gali había sido que se daría autonomía a la coordinación de transparencia para que hubiera una mejor rendición de cuentas, esto no se va a cumplir.