Por Shanik David
Desde agosto del año pasado se ha registrado un incremento paulatino en los asesinatos violentos en el estado de Puebla, siendo el pasado fin de semana un caso representativo de la situación que se vive en la actualidad, aseguró Marco Antonio Mazatle Rojas, representante del Movimiento por la Alternativa Social.
De manera puntual señaló el caso de los dos policías ministeriales que fueron asesinados el pasado sábado en la zona de Huejotzingo al realizar un operativo de vigilancia ante una denuncia de robo de combustible, así como un cobrador de la Comisión Federal de Electricidad que fue ultimado en Zautla.
A esto se suma el caso de Paulina Camargo, quien tenía 18 meses de embarazo, quien presuntamente fue asesinada por su novio al negarse a abortar.
Mazatle Rojas destacó que si bien Puebla no tiene indices delictivos tan altos como otros estados de la república, hay que considerar que en otras regiones se tienen graves problemas de presencia del crimen organizado, lo cual no se da en la entidad.
A nombre de la organización, aseguró que este escenario de violencia “es resultado de la indolencia del titular del Poder Ejecutivo, que utiliza el aparato de prevención, investigación y procuración de justicia, no para proteger a los poblanos sino para reprimir a dirigentes sociales, activistas y todo aquel opositor a su gobierno”.
Acusó además que el hecho de que Rafael Moreno Valle esté más interesado en posicionar su imagen hacia el exterior del estado por su proyecto presidencia, y que Antonio Gali Fayad ya esté pensando en la minigobernatura, ha hecho que Puebla sea “una tierra de nadie”.
