La primera cafebrería que reúne la cultura con la gastronomía de manera impecable es precisamente Módena.
Quizá sea la segunda versión de lo que fueron los inicios de Los Amorosos (polvos de aquellos lodos).
Y es que mientras los restaurantes de los Ocejo van a la baja, Módena se encuentra en su mejor momento.
En este lugar localizado en la 31 poniente 4128 en horario de las 8.00 a las 22.00 horas de lunes a viernes y de las 10.00 a las 22.00 horas sábados y domingos ofrece café, arte, libros y música.
Pero también unos deliciosos emparedados, baguettes y chapatas.
También hay desayunos.
Tres días fueron apenas suficientes a este tragón para probar sus platillos, respirar la atmósfera compuesta por lo mejor de los libros y la música especializada.
A la hora del desayuno hay que pedir un café. Es orgánico de los cafetales de Martin Josephi (ex director de la Volkswagen) localizados en Xicotepec de Juárez.
Módena, por cierto, se ubica frente a las instalaciones del edifico de la Ferrari, cuyo principal inversionista es Josephi.
Realmente es bueno. Se le recomienda el emparedado de jamón a las finas yerbas con lechuga, jitomate y queso o la chapata con jamón de pavo, serrano y a las finas yerbas. Como le hizo Los Amorosos los platillos llevan el nombre de alguna obra literaria o de algún autor famoso.
Los jugos naturales está buenos siempre que sean de temporada.
El tipo de restaurante es para tragones light. Vale la pena, sobre todo si se pretende apantallar a la pareja.
Después de un buen desayuno, vale la pena recorrer las galerías de libros y de música.
Por cierto, Módena cuenta con la colección completa de Putumayo Wolrd Music, cuya principal característica es recopilar las expresiones y ritmos musicales tradicionales de los pueblos.
Vale la pena ver el catálogo.