Por: Álvaro Delgado | Proceso
Con el respaldo de la maquinaria electoral que controlan los gobernadores y caciques estatales del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya Cortés aplastó hoy en la elección interna a Javier Corral, quien fracasó en su apuesta de “rebelión de las bases”.
Los cómputos preliminares apuntan a que Anaya obtendrá alrededor del 80% de los votos, mientras que Corral llegará apenas al 16%, en una elección de escasa participación y marcada por el “acarreo” de votantes, que se sumó a otras irregularidades denunciadas por Corral durante el proceso interno, incluida la parcialidad del órgano electoral.
Por eso, tras reconocer que los resultados no le son favorables, el candidato opositor al “consorcio” de gobernantes, legisladores y caciques que apoya a Anaya declaró que no presentará impugnación alguna ante la Comisión Nacional Organizadora de la Elección del CEN (Conacen), presidida por Héctor Larios.
“Me sentí como si estuviera compitiendo contra el PRI”, afirmó Corral, quien recordó que, pese las condiciones adversas, decidió participar y ahora ha quedado claro de qué son capaces los promotores de Anaya.
–¿Las irregularidades que denunció, incluidos delitos, van a quedar impunes?
–Son asunto que terminan incrementando la impunidad en el partido, porque ante qué instancia podríamos recurrir. La gran paradoja es a dónde acudimos. ¿Ante la Conasen? Si por ahí empezó el asunto, armaron una comisión a modo. ¿Ante el Trife, que invalidó el padrón inflado?
–¿Si no tuviera desconfianza del árbitro, ¿pediría la nulidad del proceso?
–No hay árbitro a quién pedir eso.
–¿Está en la indefensión?
–Estamos en un ambiente de impunidad.
–¿Es un triunfo sucio?
–Sí, es un triunfo trazado en la iniquidad, la simulación y la corrupción.
En conferencia de prensa posterior a los primeros resultados preliminares, rodeado de parte de su equipo y simpatizantes, Corral dijo que el movimiento que encabezó es muy importante y puede crecer, pero con el triunfo de Anaya el rescate del PAN va a tardar más de lo previsto.
–¿Reconoce que no fue capaz de convocar a la base a la rebelión?
–Sí, claro, no hemos tenido el eco, la respuesta que esperábamos. Sabíamos que era difícil, que estaba cuesta arriba, pero sí esperábamos un resultado mejor. Sería hipócrita decir lo contrario.
Volver a la oposición
Anaya, mientras tanto, se mostró exultante, tendió la mano a Corral, dijo que la contienda ha quedado atrás y es tiempo de reencuentro y de reconciliación.
Hasta anunció algo a lo que se negó siempre: Hacer pública su declaración patrimonial, fiscal y de intereses, pero también que recortará su sueldo a la mitad y que viajará en vuelos comerciales de tarifa baja.
Y hasta dio a conocer que, con él en la presidencia, el PAN volverá a ser de oposición, algo que Madero, su antecesor y a quien nombrará coordinador de los diputados federales, negó.
Reiteró también que él y los miembros del CEN “no toleraremos un solo acto de corrupción. En estos primeros 100 días crearemos órganos autónomos e independientes para investigar con objetividad y para sancionar con severidad a quien cometa un acto de corrupción”.
–¿Aunque sea cercano?
–Sin excepción alguna.
Sobre la acusación de Corral de que su triunfo está fundado en la corrupción, Anaya respondió que él tiende la mano tendida sin reservas. “Para nosotros la contienda ha quedado atrás, es tiempo de reencuentro, de reconciliación, es tiempo de unidad en el PAN para servir a México”.
