El Congreso Nacional Ciudadano capítulo Puebla abrió sus puertas a los empresarios que han sido amenazados y hostigados por parte de la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial (SDRSOT), para que en conjunto se prepare una estrategia legal para defenderse ante las presiones que son ejercidas en su contra.
Esto luego de que se diera a conocer que en la SDRSOT labora Pablo Catalina Hernández, quien dentro del organigrama de la secretaría se ostenta como evaluador en el Departamento de Impacto Ambiental, pero que en la práctica es quien ha presionado e incluso extorsionado a empresarios poblanos por el manejo y uso de los espectaculares.
De acuerdo con información publicada en la columna de Al Portador, que Catalina Hernández, quien ha publicado en internet fotos donde sale con fajos de billetes y una pistola, es el encargado de realizar los cobros a los empresarios por el uso de los espectaculares, cuota que es empleada a favor de Mario Rincón González.
Ante este escenario, el vocero del Congreso Nacional Ciudadano, Luis Soriano Peregrina, lanzó un llamado a los empresarios que han sido victimas de quien es identificado como “el pistolero” de la SDRSOT, para poder definir alguna defensa legar en contra de estas acciones intimidatorias.
El activista señaló que su organización ya ha recibido diversas quejas relacionadas con anomalías cometidas por la dependencia que hasta este fin de semana encabezó Mario Rincón González, pero que al no ser un afectado directo no pueden intervenir ni interponer alguna queja penal de manera formal.
Pese a esto, denunció que existe miedo entre los empresarios por las acciones implementadas por estos funcionarios de la secretaría estatal.
“Sugerimos y proponemos que se adhieran estas personas que son victimas del pistolero, para que se puedan sumar a este esquema de lo que venimos trabajando y juntos lo podamos trabajar”, puntualizó Soriano Peregrina.
Cabe hacer mención que en julio del año pasado el Congreso del Estado aprobó una iniciativa por medio de la cual la SDRSOT se convertía en la responsable de la regulación de los anuncios espectaculares en las vialidades del gobierno del estado, ya fueran carreteras estatales o avenidas de la zona metropolitana.
Para la revisión de estos anuncios, se contrató a la empresa Alcance Publicidad, de Sergio Riquelme, a la cual se le pagó dos millones de pesos por la superisión de los espectaculares.