¿Perderán sus privilegios en la entidad y dejarán de respaldar las aspiraciones del poblano?
Sería ingenuo pensar lo contrario. De hecho, ambos fortalecieron posiciones después del golpe mediático de exhibirlos en paraísos fiscales, construidos por quienes mantienen ligas afectivas con el mandatario.
Hank reestructuró hace unos días la deuda que fue prestada por Interacciones por el orden de los 3 mil 252 millones de pesos para pasar el mayor monto del débito a Bancomer (2 mil 900 millones de pesos) y amarró los 500 millones de pesos a fondo perdido, comprometidos por Banobras con el gobierno de Puebla.
En tanto, Jaime Camil, quien representa los intereses de Siemens en Puebla en diversos proyectos de obra, logró que el gobernador Moreno Valle metiera a su yerno Sergio Mayer, como suplente de Luis Maldonado Venegas, secretario general de Gobierno, en la fórmula a diputado federal por el PRD.
Jaime Camil padre ha sido acusado de ser una especie de coyote de empresas como Siemens para ganar contratos y repartir prebendas para favorecer a la empresa alemana en diversos proyectos.
Precisamente en Puebla, Siemens tiene un contrato por 164.8 millones de pesos para la construcción de una subestación eléctrica que va a surtir de energía a la nueva planta de AUDI, instalada en San José Chiapa, Puebla.
Además, Mayer es el representante de artistas que contrata el gobierno del estado para los festejos conmemorativos en Puebla.
Hank mantiene con sus otros socios, Armando Hinojosa Cantú y David Peñaloza, obras y proyectos por 26 mil 212 millones en Puebla, durante el sexenio de Rafael Moreno Valle.
Tal cantidad representa 34 por ciento del presupuesto estatal para el 2015, es seis veces más del gasto que ejercerá la capital poblana en el mismo periodo y cuatro veces lo que manejará el próximo año en subsidios la BUAP.
Hank y Camil sí ven a Moreno Valle en Los Pinos.
