El presidente del Foro Nacional de Legisladores, Luis Antonio Muñoz Mosqueda, pidió a los priístas en Puebla cerrarle el paso a las aspiraciones presidenciales del gobernador Rafael Moreno Valle, que están cimentadas con recursos públicos.
Por su parte Alberto Amador Leal, quien la tarde de ayer entregó la estafeta como dirigente estatal en Puebla de ese organismo priísta a la cenesista Cecilia Hernández Ríos, se pronunció porque los militantes tricolores arropen a Enrique Peña Nieto, el primer priísta del país ante la crisis en la que está inmerso por el caso Ayotzinapa.
Las declaraciones se produjeron durante el acto protocolario mediante el cual se realizó el cambio de dirigencia y en donde estuvo presente la presidenta estatal del tricolor, Ana Isabel Allende quién se retiró sin hacer declaración alguna a la prensa.
Lo único que Allende Cano planteó durante su participación en el acto protocolario fue que su partido está aprendiendo a ser oposición en el estado.
Evitemos un nuevo Fox
Durante el acto protocolario Muñoz Mosqueda recordó lo sucedido con el que fuera gobernador de Guanajuato, de donde es originario el ex diputado federal priísta, “tuvimos un hombre que todo el mundo tildaba de loco, un hombre que hizo lo mismo que el gobernador poblano en este momento, que con el recurso público de Guanajuato viajó por todo el país, viajó por todo el mundo, y lo dijo desde el primer día que se sentó en la silla gubernamental y nadie, nadie lo pudimos evitar, y vean las consecuencias que tuvimos con Vicente Fox”.
Por ello, insistió que trabajen en un unidad para “evitar que esos personajes políticos de momento lleguen a cristalizar sus sueños, que desde nuestro punto de vista es un sueño de opio”, y para lograr que su partido gane en el 2015 “y después evitemos esas situaciones que serían de mucho enojo para el priísmo en el 2018”.
Arropando a Peña
Por su parte Amador Leal reconoció en su discurso que el gobierno federal emanado de su partido enfrente en este momento una crisis en las que dijo hay que repartir culpas, pues lo sucedido en Iguala es responsabilidad de gobiernos emanados del PRD, pero es el PRI quién está arrastrando con el peso dela culpa y el costo político.
“Este tema de Iguala que está claramente identificado que el origen partidista de los principales actores protagónicos y responsables de los hechos, pues no son del partido, y sin embargo hay una embestida impresionante en contra del partido, pero más que del partido del presidente. Y es imperativo defender al presidente de esta acometida y solo lo podemos hacer si explicamos y recordamos como sucedieron los hechos, porque finalmente, respetando el dolor y la conciencia nacional e internacional que ha sido lastimada, no podemos hacer caso omiso de que existe una estrategia de naturaleza política que está aprovechando este contexto”.
Por ello pidió a sus correligionarios arropar a Peña Nieto, pues el costo político se verá reflejado en las urnas y eso debilitará a su partido.