Hubo que esperar a que concluyera el segundo periodo de sesiones para que la actual legislatura llegara a los acuerdos necesarios para amarrar la agenda en común sobre la que trabajaran los diputados los próximos cuatros años.
Así lo dio a conocer el presidente de la Junta de Coordinación Política, Víctor Manuel Giorgana, quien además adelantó que será en tres semanas más cuando el documento se presente de manera formal.
El diputado priísta informó que fue la mañana del pasado jueves cuando se firmó por todos los coordinadores parlamentarios el “documento marco de la agenda legislativa”.
Y que en la presentación pública que se realizará se invitarán a los representantes de los otros poderes estatales, el Ejecutivo y el Judicial, para que atestigüen los compromisos legislativos que asumieron las nueve fuerzas políticas con representación en el Congreso.
“Será pasando el descanso que tienen los trabajadores del Congreso, estamos hablando de la tercera semana de agosto, pero ya hay el compromiso de los coordinadores de caminar con un marco general como el que incluye la agenda legislativa”.
La agenda legislativa se logró con casi dos meses de retraso pues inicialmente se había anunciado que estaría lista con el arranque del segundo periodo de sesiones, es decir el 1 de junio pasado, y no fue hasta 31 de julio que se logró la firma conjunta del documento.
Durante esos 60 días el presidente de la junta de coordinación política justificó en varios momentos los retrasos argumentando la existencia de temas polémicos como la eliminación de la figura de las candidaturas comunes, o incluso el que el Congreso del estado tuviera su propio “reloj legislativo”.
Sobre el retraso y las negociaciones políticas señaló que “los tiempos y los momentos en el Congreso siempre son afectados por coyunturas de orden político que tienen que irse procesado, en este momento encontramos las coincidencias en tiempo espacio y voluntades para hacer pública la agenda”.
Entre las “bondades” que presumió Giorgana sobre la agenda legislativa está, dijo, el que “estandarizará” las disposiciones de convenios y tratados internacionales con el marco jurídico local, “el alineamiento de lo internacional”.
También adelantó que los cambios en la legislaturas y marcos jurídicos federales obligan a entrar también a revisión del marco local para adaptarlos.