El rector Alfonso Esparza aseguró que los concursos de obra llegaron para quedarse en la BUAP, como parte de la transparencia que imprimiría a su gestión, amén del cumplimiento en la entrega de obras de calidad.
Pues ni una ni otra cosa.
Y es que las empresas ganadoras de las licitaciones ya agotaron prácticamente los plazos en la conclusión de las obras.
De acuerdo con datos oficiales, la construcción del edificio de danza moderna, perteneciente a la Facultad de Artes, ubicado en la calle Cúmulo de Virgo, en la reserva territorial Atlixcáyotl, en San Andrés Cholula, reporta un avance del 25 por ciento y la fecha de la entrega de la obra era el 21 de abril del 2014.
Dicha obra fue ganada por Magín Idelfonso Torreblanca Ramírez, en participación con JM Creando Arquitectura de Puebla por 17 millones 961 mil pesos. Los trabajos iniciaron el 23 de diciembre del 2013.
Otro fiasco es la construcción de la segunda etapa del edificio del Círculo Infantil, ubicado en la zona 2 de Ciudad Universitaria, en Puebla capital.
La obra tenía que haberse entregado el pasado 21 de mayo del 2014, luego de iniciar el 18 de diciembre del 2013, pero es la fecha en la que lleva apenas un ridículo avance del 20 por ciento.
Esta obra quedó en manos de Arrendamiento, Renovación y Comercialización de Maquinaria para la Construcción por un monto de 43 millones 381 mil pesos.
Los afanes de transparentar la obra, por la vía de las licitaciones, tras décadas de opacidad han chocado con la realidad y la pena ajena.
La construcción del edificio G de tres niveles para la unidad regional de Tehuacán, ubicada en la carretera Libramiento Tecnológico San Marcos, en el kilómetro 7.5 de San Marcos Necoxtla tuvo un costo de 24 millones 938 mil pesos.
El concurso lo ganó Gruconst de Aristeo Reyes. Inició la obra el 13 de diciembre del 2013 y tenía que entregarla el pasado 14 de mayo del 2014. No lo hizo. Sus trabajos apenas llevan un avance del 27 por ciento.
Por último, la construcción del edificio multiaulas 4 en cuatro niveles, ubicado en la zona 2 de Ciudad Universitaria, en Puebla, inició el 13 de diciembre del 2013.
La obra corrió a cargo de Urbanizadora ADRP con un precio de 31 millones 871 mil pesos. Es casi imposible que se entregue el próximo 13 de junio del 2014, fecha establecida en el contrato, pues apenas tiene un avance del 22 por ciento.
Los datos duros exponen que las licitaciones resultan un fiasco, además de que resulta sospechoso que quien por años favoreció la asignación directa a sus socios, el agüerista Manuel Sandoval, ahora esté a cargo de la supervisión de las obras que presenten terribles rezagos.
