El PRI acató sin problemas el fallo del Tribunal Electoral del Estado de Puebla y en menos de 24 horas cambió el nombre de su alianza electoral con el PVEM de Mover a Puebla a coalición 5 de Mayo.
Al soltar un “que inicie la batalla”, el delegado del Comité Ejecutivo Nacional, Fernando Moreno Peña, sostuvo que la resolución del organismo electoral que los obligó a cambiar nombre y emblema es parte de la elección de Estado que opera el gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas, pues en política no existen casualidades.
“Hemos venido señalando conductas particulares de quienes integran a los órganos electorales, tenemos confianza en las instituciones, en los órganos colegiados, pero hay conductas personales que hemos denunciando; todo se va conjugando, el gobernador aparece en una foto ostentando su intromisión en el proceso.
(…) Vamos a seguir adelante con más ímpetu, con más ganas en el entendido que sentimos que vamos bien, por eso la preocupación del Estado para buscar de qué manera tratan de detenernos”, sentenció.
El ex gobernador de Colima admitió que la modificación del nombre de la alianza tiene repercusiones económicas, aunque no reveló el monto, pues el PRI ya tenía la publicidad para sus candidatos a 217 ayuntamientos y el Poder Legislativo con el título de Mover a Puebla, además de que los sptos para radio y televisón ya se entregaron al IFE para el pautado correspondiente, sin embargo, descartó una merma en las finanzas partidistas.
“¿Qué si afecta económicamente? Pues ya se tienen las pautas y ya está entregado, ya entregamos promocionales y los vamos a tener que cambiar. Pero esto no es un asunto de dinero, ni de gasto. Nosotros no estamos nerviosos. Lo importante es que la vamos a acatar el fallo”, puntualizó.
El revire panista
Tras condenar que el PRI use el nombre “5 de Mayo” para su alianza electoral con el PVEM, el dirigente estatal del PAN, Rafael Micalco Méndez, ironizó con el tema y recomendó mejor bautizarla como “2 de noviembre” porque representará la muerte electoral ya que los poblanos cobraran la factura en las urnas por usar una fecha tan emblemática para asuntos políticos.
Además reprochó que los adversarios políticos se cuelguen de la labor que realizó el gobierno del estado para posicionar la marca, a propósito del 150 aniversario de la histórica batalla.
Refirió qu e analiza impugnar el nuevo nombre toda vez que es preferible que el Partido Revolucionario Institucional y el Verde Ecologista asuman el costo político de su decisión.
