Por Karina Fernández
La gobernabilidad no se negocia ni se condiciona, señaló la lideresa estatal de Morena, Olga Romero Garci-Crespo, en torno a las diferencias del gobierno municipal de Quecholac con la administración estatal.
El partido vinotinto en Puebla fijó su posicionamiento ante la polémica que se generó entre autoridades de ambos niveles de gobierno, derivado del bloqueo carretero de agricultores en la zona.
En un mensaje vía redes sociales, Romero Garci Crespo puntualizó que Morena rechaza cualquier intento de convertir diferencias administrativas en confrontaciones políticas, como supone ocurre con el ayuntamiento encabezado por Guadalupe Martínez.
“Quisiera comentarles sobre los hechos ocurridos en Quecholac. Reiteramos que la gobernabilidad del estado no se negocia y mucho menos se condiciona. Las instituciones de cualquier nivel de gobierno están para garantizar el orden y proteger a la ciudadanía. Deben coordinar esfuerzos para encontrar el bienestar ciudadano”.
Acusó que intereses ajenos a los de la ciudadanía prevalecen en el municipio por lo cual manifestó su respaldo al gobierno del estado y al secretario de Gobernación a quien convocó a no caer en provocaciones.
“En Morena rechazamos cualquier intento de convertir diferencias administrativas en confrontaciones políticas. La transformación exige serenidad y coordinación, no descalificaciones ni provocaciones”, expresó.
Reafirmó su llamado para coordinar esfuerzos en favor de los ciudadanos, en temas de seguridad y gobernabilidad pues puntualizó que cualquier gobierno debe garantizar orden y protección.
La dirigencia nuevamente fijó postura después del llamado que el gobernador Alejandro Armenta hizo al partido para involucrarse en temas de carácter político después de la manifestación del 25N.
