Por Karina Fernández
El presidente estatal del PRI, Néstor Camarillo dijo que su partido no ha descartado la formación de alianzas rumbo a las elecciones de 2027 pero puntualizó que no habrá acuerdos con el dirigente del PAN, Mario Riestra Piña.
En rueda de prensa, aclaró que sus diferencias son con la actual dirigencia mas no con su militancia, a propósito de la cercanía que mantiene con el ex alcalde Eduardo Rivera Pérez.
Sin embargo, puntualizó que tampoco permitirá que el PRI sea menospreciado por el Comité Estatal del albiazul o algunos actores políticos que han puesto en duda las aportaciones hechas por el partido en pasados comicios.
“Siempre lo he dicho. Las alianzas llegaron para quedarse, que si hay un dirigente que no quiera hacer alianza con el PRI porque cree que le resta más de lo que le suma, es un personaje político, no un partido. Mi problema no es contra un partido sino contra sus dirigentes”.
Consideró que los resultados que dejó la pasada elección en Veracruz es ejemplo de que las alianzas llegaron para quedarse, pues dijo que en esos comicios, el PAN perdió casi medio millón de votos.
Incluso, señaló que Morena necesita del Partido del Trabajo y Verde Ecologista por lo que el tricolor no se ha cerrado a la posibilidad de formar alianzas en los comicios de 2027.
El priista defendió los 300 mil votos que su partido consiguió en 2024, pues dijo que no están asociados con programas sociales que opera Morena, pues son sufragios que los ciudadanos depositan convencidos con las propuestas de sus candidatos.
Cabe recordar que las diferencias entre los dirigentes de PRI y PAN surgieron cuando, en las elecciones extraordinarias, el panista Mario Olvera, que el tricolor registro como su candidato a alcalde de Chignahuapan, declinó al proceso.
