Por Valentín Varillas
Facundo Rosas y Víctor Carrancá, personajes clave en el sexenio de Rafael Moreno Valle, estuvieron involucrados directamente en el tema del encarcelamiento de Israel Vallarta y la francesa Florence Cassez.
Sin embargo, lejos de hacer equipo, en ese momento estuvieron en bandos contrarios.
Al momento del tristemente célebre montaje, en donde supuestamente se desmantelaba la peligrosa banda de secuestradores “Los Zodiaco”, Facundo se desempeñaba como director de Análisis Táctico de la Agencia federal de Investigación (AFI).
Instancia que encabezaba Genaro García Luna, quien, en complicidad con Televisa y TV Azteca, habrían diseñado y operado la puesta en escena.
Rosas Rosas ya era un incondicional de quien hoy se encuentra encarcelado en Estados Unidos por sus amarres con el Cártel de Sinaloa.
En cambio, Carrancá llegó a formar parte del equipo de abogados que defendía a Florence Cassez.
De acuerdo con Jorge Volpi, en su libro “Una Novela Criminal”, era socio de Agustín Acosta, Juan Araujo y Carlos Riquelme en el despacho Consultores Legales, “centrado en asuntos de derecho penal, administrativo y financiero”.
En la página 254, Volpi relata cómo, ante una petición especial de su socio y amigo, Agustín Araujo, Carrancá pasa todo un fin de semana en su casa de Cuernavaca analizando a fondo los puntos finos de la defensa de la francesa.
Hay frases reveladores que muestran la importancia que esta cruzada legal tenía para el entonces abogado litigante.
““Por lo que puedo ver aquí”, resume Carrancá, “Florence no recibió asistencia consular, violando un sinfín de preceptos legales y tratados internacionales.
Este sería el punto medular mediante de la estrategia de la defensa y de la apelación que a principios de enero de 2009 presentaron ante el Primer Tribunal Unitario de Circuito.
Pero eso no es todo.
En su opinión: “Florence fue detenida de forma ilegal, sin que existiese orden de aprehensión en su contra y sin que se supiese el día y la hora de la hora de su detención; que no se valoró los videos del montaje y no le importó (a la jueza que dictó sentencia) que, al presentarla en televisión cuando fue detenida la policía hubiese violado sus derechos subjetivos; que no tomó en cuenta que la policía no la pusiera a disposición del Ministerio Público de manera inmediata como marca la ley; que no valoró la infracción a las reglas establecidas para los careos como testigos que la acusaban; y, en fin, que no le importó que la policía violase su derecho como extranjera a recibir el auxilio de su embajada”.
Ya como funcionario público en Puebla, Carrancá pervertiría todo el entramado legal que compone el sistema de procuración de justicia estatal.
Es decir, llegaría a hacer lo que en su momento tanto criticó y defendió.
Facundo y Víctor, enfrentados en su momento por la trama Vallarta, terminaron siendo los auténticos gatilleros de Moreno Valle.