Por Karina Fernández
Luego de que presidentes y secretarios de las últimas dos dirigencias del PAN estatal se retribuyeron más de millón y medio de pesos en finiquitos, la diputada Celia Bonaga se pronunció porque las cantidades se unifiquen para evitar abusos.
Argumentó que las gratificaciones que se asignaron, como prima vacacional, aguinaldo, prima de antigüedad, entre otros, son conceptos y derechos reconocidos por la Ley Federal del Trabajo.
Sin embargo, ante la falta de parámetros y reglas al interior del partido para determinar los montos, se observan pagos excesivos, que distan de los resultados entregados por cada gestión, reconoció la propia legisladora del PAN.
“Se tendría que hacer un llamado desde cada administración porque, de lo contrario, sería como regular algo que ya está regulado por la Ley del Trabajo, que ya manifiesta ese tipo de acciones en donde al terminar un periodo si puedes asignar algún bono económico a tu personal; entonces, más bien que no abusen de eso que ya está en una ley”, abundó.
La diputada local dejó ver que estas decisiones impiden que las dirigencias tengan un buen cierre de sus gestiones, con más señalamientos que reconocimientos por parte de la militancia.
Cabe recordar que, de acuerdo a documentación en poder de este portal, en 2021, Genoveva Huerta y Jesús Giles se despidieron del Comité Directivo Estatal (CDE) con finiquitos por 1.2 millones de pesos.
En diciembre pasado, Augusta Díaz de Rivera y Marcos Castro se asignaron poco más de 400 mil pesos por el mismo concepto. En su período al frente del PAN, ninguna dupla recuperó la gubernatura perdida en la elección de 2019.
