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Karina Fernández |
Jueces y magistrados están usando el nombre del gobernador Alejandro Armenta Mier para influir en las decisiones que se toman en el Tribunal Superior de Justicia (TSJ); situación que se investigará para actuar contra estos personajes.
Así lo denunció el propio mandatario estatal, quien recordó que el tráfico de influencias es un delito, por lo cual reafirmó que ningún personaje puede atribuirse relación, influencia o derecho de representación suya ante el Poder Judicial.
“Las amistades, compadrazgos y familiaridades se honran, no se presumen, y quien llega al Poder Judicial a nombre de un servidor a querer influir en los órganos del tribunal está cometiendo un delito (…) algunos han llegado y sienten que la amistad les otorga pasaporte a la impunidad o influyentismo, estamos investigando y vamos actuar contundentemente”, advirtió.
Armenta Mier puntualizó que los únicos canales de vinculación con dicho órgano autónomo como es el caso de la presidenta del Tribunal, María Belinda Aguilar Díaz.
En su conferencia matutina, el gobernador del estado también frenó al presidente de la Canirac, Carlos Azomoza, quien recientemente pidió un lugar para la cámara en la mesa de seguridad, pues dijo que no es un espacio para atender intereses particulares.
Explicó que el sector privado y patronal están representados a través del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Coparmex, organismo que fue integrado por su gobierno para atender los temas que preocupan al gremio.
“No podemos tener una mesa más amplia porque se convierte en un mitin y ya no es una mesa de seguridad sino de filtración, y hay intereses, entonces tenemos que ser cuidadosos, pero le ofrecemos a Carlos Azomoza toda la disposición para dialogar, tener encuentros con su equipo, para atender sus inquietudes”.
Sentenció que su gobierno está dispuesto a escuchar a todos los empresarios, no solo a las cúpulas, pues dijo que todos tienen el mismo valor para su administración como generadores de empleos y como parte de la economía local.